Slowly dying

Chapter 10: Rain

Jungwon caminaba apresuradamente por los pasillos de la escuela realmente cansado tanto física como mentalmente.

Habían sido unas semanas muy ajetreadas y eso se reflejaba en él.

Primero lo que pasó en la fiesta, dos días después le dijo a su familia (menos a Wonyoung) su situación médica, no lo tomaron mal para nada, pero empezaron a tomar medidas muy exageradas para cuidarlo, y lo agradecía pero casi le prohibieron asistir a la escuela prescencialmente.

Todo empeoró cuando se desmayó dos veces en un día justamente el día que fue al médico para agendar la fecha de su cirugía, ahora eran épocas de exámenes y debía estudiar demasiado, casi no podía dormir porque en las noches algunos dolores se hacían presentes e interrumpían su sueño.

Y ahora se le juntaba otro problema y era que Jay lo seguía a cualquier lado para intentar hablar, Jungwon lo evitaba pero le comenzaba a hartar, incluso al salir de clases Park estaba fuera del salón, se sentía acosado.

A veces Jay manda a su amigo Heeseung para mandarle notas y Jungwon ni las leía, solamente las tomaba y tiraba al bote de basura.

¿Por qué ahora quería hablar tanto con él? Después del daño que hizo no cree que sea pertinente hacerlo.

Sin embargo, le alegraba tener buenos amigos que estaban con él para todo.

Como Huening Kai, con el que repentinamente se estaba haciendo más cercano, el hawaiiano siempre estaba con él hablando o invitandolo a su grupo con Beomgyu, Taehyun, Soobin y Yeonjun para distraerse un poco, a veces se les unía y a veces no, todo dependía si sentía con ánimos de socializar un poco.

Taehyun y Beomgyu también estaban muy presentes, aunque eso era desde antes agradecía que no lo hayan olvidado por su condición, la parejita siempre le buscaba y le preguntaba si se sentía mejor, incluso Beomgyu comenzó a llevar un botiquín de primeros auxilios exclusivamente para él.

También estaba Sunoo.

Él desde antes era un amigo suyo, aunque ya no hablaban tanto por cuestiones de horarios y proyectos.

Kim desde que se enteró de su enfermedad comenzó a llevarle frutas o postres que él mismo hacía para llenarle y alegrarle el estómago como el mismo decía.

Hasta Soobin y Yeonjun se acercaban para saber si se encontraba bien a pesar de no ser tan cercanos.

Asi que no se sentía solo, tenía grandes amigos a su lado que se preocupaban por él y lo agradecía mucho.

Justo ahora estaba huyendo de un Jay que parecía no importarle que estaba llamando la atención de todos los que circulaban por ahí debido a que gritaba su nombre para dialogar.

Suspiró fastidiado y comenzó a correr perdiéndose entre la gente.

Ya había perdido de vista a Jay así que sonrió victorioso, pero su sonrisa se borró al verlo de frente a él de nuevo.

No sabía como supo que estaría allí, pero ahí estaba mirándolo con el ceño fruncido.

— ¿Qué te pasa?

— ¿A mi? Mejor dicho a tí, pareces un maldito acosador

— Bueno, si, pero..

— Dime lo que me tenías que decir, ya me quiero ir de aquí y...

— ¿De verdad sentías algo más por mi?

Preguntó Park interrumpiéndolo mientras lo miraba fijamente, poniendo al menor nervioso.

— Ya te lo dije, si, ¿Y luego?

— Nada, solo... es raro

— ¿Qué? ¿Que me gustes es raro?

— Algo así, digo, eramos amigos

— Lo sé, por eso nunca te lo dije, era tan absurdo y muy evidente que no era correspondido que simplemente me callé

— Si lo hubieras dicho antes yo..

— ¿Tu qué? ¿Me hubieras rechazado amablemente?

Jay desvió la mirada al suelo apretando los puños, no sabía que responder.

— Eso creí, bueno yo me voy si no tienes nada que decir

Jungwon se fue de allí enojado y decepcionado creyó que el mayor se disculparía por su comportamiento tal parecía que no.

Suspiró agotado y comenzó a caminar para salir de la escuela, sin embargo cuando llegó a salir de la escuela comenzó a llover.

Notó que todos llevaban paraguas pero el lo había olvidado en casa, genial, ahora debía esperar a que la lluvia acabara.

Se comenzaba a mojar más por lo que se iba a dar la vuelta para regresar por donde vino pero una sombra sobre de él lo confundió mirando a Huening Kai.

— ¿Kai?

— Te vas a mojar, Won, vamos a tomar el autobús

— Gracias, Hyuka

— No hay de que

Ambos sonrieron y comenzaron a caminar debajo de la sombrilla del mayor.

Mientras Jay llegaba a la salida de la escuela y miraba aquello.