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Todo el mundo creía que vivir en Los Angeles era todo de ensueño, así como en las películas salian. Con su clima perfecto, famoso caminando de allá por allá, grandes estudios de televisión donde puedes debutar y alcanzar esa tan aclamada fama que todo el mundo desea o alguna vez desearon. Pero nadie realmente sabía que Los Angeles podría llegar a ser un infierno
La rubia desde pequeña tuvo que aceptar que Los Angeles era un infierno, desde que tenia memoria sabía que LA no era como todos creian. Sin embargo, se tuvo que adaptar a aquel eterno lleno de paparazzi, a chismes que se venden como el pan de la mañana, a premieres y fiestas que era obligada a ir ya que su madre quería mantener una imagen falsa de que eran la familia modelo de Hollywood. Cuando crecio y empezó a escribir, dudo en publicar sus libros o seguir escribiendolos, ya que no quería volver al ojo público de todo el mundo. Siempre se mantuvo en perfil bajo, nunca daba entrevistas y casi no hiba a ninguna premiere
Había logrado mantener un perfil bajo hasta que apareció aquel muerto dentro del set de grabaciones
-Hola señora Ely- saludo a la mujer mayor mientras entraba a la librería. La señora le sonrio mientras le devolvia el saludo
Emmanuelle empezó a caminar a su sección favorita de todas: la sección donde estaban los libros de horror. Ya se habia leído casi todos los libros posibles, su favorito siempre sera Carrie, el cual quería comprar nuevamente porque el anterior que tenia fue completamente ensuciado con su café
-Oh Spencer, hola- dijo Emma haciendo que el castaño de un pequeño salto del susto-¿quieres que te recomiende algún?- pregunto amablemente con una sonrisa brillante en su rostro
Ella se quedó mirando el estante de libros, a la vez miraba al castaño esperando algún respuesta por parte de él. Spencer, simplemente se quedó algo hipnotizado por Emma
-Hola- saludo él mientras agarraba la tira de su bolso que cuelga en su hombro- Ya me he leído todo los libros que ves aca, incluso se la biografía de cada autor de todos los libros que ves aca. Tengo memoria eidetica- explicó
