Capitulo 10

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Todavía seguía aturdida por todo lo que había pasado hace una semana. Todavía no podía creer que los asesinos que buscaba, lo tenia delante mía. Todavía estoy destrozada al descubrir tal traición. Pero aquí estoy, siendo abrazada por Conway mientras me relajo en su pecho, me comento que no esta acostumbrado al contacto físico, al amor en general, y aun así me permite estar tanto tiempo a su lado. No se que haría sin el.

Me he estado comunicando con la mafia como normalmente lo hacia, mintiéndoles a la cara como ellos lo estuvieron haciendo por años, aun piensan que todo va acorde a su plan sin saber que todas las llamadas ahora las hago con Conway a mi lado, ya no tengo necesidad de esconderme nunca mas.

Hoy se llego el día de la redada, me encuentro muy nerviosa por lo que sucederá a continuación, es por eso que mi hombre ahora se encuentra consolándome aprovechando que los cadetes a un se encuentran alistándose. Son tan lentos. De hecho, ya deberíamos bajar, no podemos dejar que los demás nos esperen mas de la cuenta. Un pequeño beso y nos encontramos listos.

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Juanjo: ¡¡¡¡T/N!!!! ¡¡Que gusto volver a verte!!

Me abrazo y me apretó lo mas que podía por lo emocionado que estaba. Todos los presentes hicieron lo mismo aplastándome con cariño. Es triste decir que yo no me alegraba nada de verlos. Estaba tan enojada que queria enfrentarlos en ese mismo instante, pero el plan debia de continuar.

T/N: Me da gusto volver, Armando me llamo diciendo que querían verme - Hice la sonrisa mas creíble posible -

Yun: Clalo, te queliamos aquí pala organizal nuestlo plan malévolo - Si, tu eres al que le tengo mas rabia -

Les conté toda la información que pude obtener en todos estos meses. Nombres, direcciones, números, sus organizaciones, cosas de importancia. Claro, mentí un poquito. Al ellos tener toda la confianza en mi, nunca dudaron y hasta me felicitaron. Discutieron un poco de nuestro siguiente movimiento, pero no escuche mucho, mi mente solo pensaba en una cosa.

T/N: Buena idea, pero yo propongo algo mejor - Todos voltearon a verme - Que tal si, un día cito a Conway mintiéndole para encontrarnos a solas, ustedes acuden al lugar a escondidas y cuando yo de la señal, salen de sus escondites apuntándole a la cabeza.

Saque mi arma rápidamente y apunte directamente a la cabeza de Yun. Si, lo que conté fue realmente nuestro plan. No paso ni un segundo cuando todos mis compañeros salieron de sus escondites apuntando a cada uno de los integrantes de la mafia. Pude ver claramente su sorpresa y como se arrodillaban con las manos en la cabeza. Estaban completamente rodeados. Fueron cacheados, a cada uno se les rebato las armas de fuego, un poco de cocaína y un par de ganzúas.

Conway: ¿¡Que pasa nenas!? ¿¡Porque tan sorprendidos!? - Rio victorioso -

Yun: ¿No lo se? ¿¡Tal vez polque T/N me esta apuntando a la puta cabeza!? ¿¡Eles gilipollas T/N!?

Juanjo: ¿Qué es todo esto T/N? ¿Por que? - Se notaba la confusión en su voz, pero sobre todo tristeza y decepción -

T/N: Tal vez yo debería hacer las preguntas... ¡MENTIROSOS DE MIERDA! - Aprete mi arma entre mis dos manos. Quería jalar el gatillo. Quiero hacerlo -

Conway: Con calma hermosa... Pronto podrás hacer lo que te plazca con ellos... - Se acomodo a mi lado poniendo una mano en mi cadera, me jalo hacia el hasta que nuestras caderas chocaron. Gracias a el pude calmarme un poco -

Emilio: ¿¡Todo esto es por que te enamoraste del hijo de puta de Conway!? ¡ESTAS PENDEJA!

T/N: Ojala solo haya sido por eso Emilio... - Le di una mirada de odio y volví a mirar a Yun - Ojala este imbécil... ¡NO HUBIERA MATADO A MIS PADRES!

Un pequeño silencio se creo en el lugar, algunos bajaron la cabeza o solamente miraron a otro lado avergonzados. Yun solamente me miro sorprendido.

Yun: T/N... No es lo que piensas... Lo julo...

T/N: ¿¡Asíí..!? ¿¡Y cuando me lo ibas a explicar Yun!? ¿¡Ahora que te estoy apuntando con mi arma!? ¿¡Ahora solamente porque tienes miedo de que te mate!?

Yun: ¡NO ES TAN FACIL! Siemple te he visto como mi helmana pequeña, no es fácil hablal con tu helmana pequeña que mataste a sus padles...

T/N: Entonces debiste matarme a mi también. Sabias que algún día iba a saberlo y te iba a meter en esta situación. Si no eras capaz de explicarlo, todo habría sido mejor si me hubieras matado. Eres un cobarde para hablar pero no para matar.

Conway: Todos ustedes estarán en perpetua por asesinato a dos agentes de policía y por ser cómplices del asesinato - Se separo de mi y camino rodeando a los detenidos hasta quedar detrás de ellos - Pero talvez algunos no lleguen a perpetua. Depende de lo que la vida elija para ustedes.

Voltee a verlo y el me miraba con una linda sonrisa. Sabia lo que esa sonrisa queria decir. Lo que sus palabras querian decir. El me estaba dando todo el permiso. Nunca hablamos de esto, pero realmente si lo llegue a pensar muchas veces. Claramente esta no era mi primera redada, sabia que a veces pasaban algún que otro "accidente" con los delincuentes y podían terminar secuestrados, torturados, hasta muertos, pero que raro... nunca se encontraba información sobre esos incidentes. Nadie sabia nada.

Volví a tomar mi pistola con fuerza y rabia. Mire a Yun y me asegure que el me mirara igualmente. Sus ojos expresaban miedo, como si en algún punto de su corazón el pensara que en realidad no lo iba a ser, que en realidad todo era un actuación mía para después salir todos juntos de aquí y olvidar el pasado... pobre.

Yun: - Susurro - Todos estos años... - Sus lagrimas brotaron -

Emilio: ¡T/N ESPERAAA!

Aprete el gatillo sin pensarlo, con odio, repetidas veces. ¿10? ¿15 veces? Perdi la cuenta. De hecho hasta que tuve que recargar para poder seguir disparando. ¿Que es esta adrenalina? Nunca la habia sentido antes. ¿Estoy llorando?

Armando: ¡ESTAS DEMENTE! ¡TE JURO QUE...

Oficial: ¡Si te mueves un centímetro te volare tu estúpida cabeza!

Se escuchaban sollozos, maldiciones y quejidos en el lugar. Ahí estaba Juanjo llorando mientras su ropa se ensuciaba por la sangre del cuerpo que estaba a su lado. Si, lo hice. Conway se incoó hasta estar a la altura de Armando, este solamente se encontraba con la mirada perdida.

Conway: - Susurro - ¿Qué se siente que te maten a los tuyos?

Se incorporo riendo con su típica risa malvada dirigiéndose a mi. Nuevamente se acomodo a mi lado poniendo su mano en mi cabeza y empezó acariciarla. Ya había bajado mi arma y me deje llevar por las caricias para poder tranquilizarme.

Conway: Ustedes tuvieron suerte que la vida - Me revolvió el cabello mientras me miraba de reojo - haya decidido que se vayan a perpetua.

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Todo había acabado. Ese peso que siempre tuve toda mi vida por fin se había ido. Nunca había matado alguien, era una experiencia algo traumante, por algunas semanas anduve pensando que si lo que había hecho era lo correcto. Conway nunca me dejo sola en esos momentos, el me ayudo mucho. Segui siendo parte de la policia porque es lo que realmente me hacia feliz. Tengo compañeros que me cuidan y me sacan buenas carcajadas. Claro, también mi atractivo jefe que es realmente mi pareja.

Gracias a el, cumplí lo que mas quería, mi venganza.


La Venganza - Jack Conway y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora