El saco

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Después del incidente en el café, Taylor ya no había hecho ninguna de sus escapadas por más que quisiera volver a ver a cierta británica.

Pero lo curioso era que no había salido ninguna noticia sobre su visita a dicho lugar, por más que busco en internet, no había nada.

Taylor tenía un par de teorías; la primera es que la chica simplemente decidió no poner nada respecto al tema en internet; la segunda era que en realidad si habia publicado algo y su representante se habia encargado de eso; y la tercera es que la camarera en realidad no la había reconocido.

En este caso para ella la tercera era sin duda la menos probable, pues su cara se había hecho cada vez más reconocida con el exito de su último álbum y su próxima gira.

Se habían prohibido temporalmente sus escapadas secretas, hasta arreglar el asunto de quién la había reconocido, la forma en que la miro le dió a entender que sabía quien era.

Y no podía estar más equivocada.

Quizo intentar conocer a la linda camarera pues la había parecido muy bella y amable, además de que su acento le daba un aire encantador, como el de una princesa.

Era difícil tener algún ligue cuando eres famosa.



Por otro lado Kristen había lavado el saco y lo llevaba todos los días a su trabajo, con la esperanza de volver a ver a la pelinegra para poder devolverle su abrigo y disculparse.

Pero había perdido la fé después de haber pasado casi un mes sin que volviera a aparecer por el lugar.

Definitivamente la había espantado.

Se culpaba a si misma por no haber sabido controlar sus nervios y asustar a la clienta logrando que saliera corriendo despavorida.

- La verdad, no creo que vuelva - dice la pelirroja llegando a su lado - Digo, por lo que ví y lo que me contaste, yo no volveria si fuera ella.

La más alta la mira molesta frunciendo el ceño.

- No me estás ayudando, May - dice desanimada - Ya tengo suficiente con mi propia conciencia - frustrada lleva sus manos a su rostro.

Sus prácticas la tenían un poco agotada, el estrés de su trabajo seguía presente y más con su primera audición en meses en un par de semanas. Había una gran presión sobre ella.

- Perdón, solo digo lo que pienso - y era verdad la pelirroja solía ser muy honesta, a tal punto de hablar sin ningún filtro en ocasiones. Lo cuál Kristen apreciaba mucho, pero en este momento no le era de mucha ayuda.

- Ugh, tan solo quisiera disculparme ¿Por qué nunca puedo hablar con las chicas que me parecen lindas? - responde exasperada - Digo, puedo coquetear con un hombre sin problema, pero si se trata de una mujer es como si olvidará como respirar - dice en un suspiro - Esas es mi condena como bisexual, saber hablar con los hombres pero ser una completa mierda al intentar algo con una mujer.

- Hey, tranquila tal vez solo le tomé un poco de tiempo el superar el momento vergonzoso para animarse a volver a venir.

-Eso espero.

La misma noche después de que Kristen se quedará con el saco de la pelinegra, Edgar la llamo tal y como lo había prometido.

Le dijo que una amiga suya que era representante de una artista reconocida internacionalmente tanto como Demi estaba por iniciar su gira el próximo año y que las audiciones serían a principios de diciembre. Por lo que tenía dos meses enteros para prepararse y darlo todo.

Todo el tiempo que no estaba en su trabajo o durmiendo ella estaba ensayando, el resto de los bailarines que se presentarán no pasaron tanto tiempo recuperándose de una lesión, sino que estubieron practicando y trabajado en otros proyectos, por lo que tenía que subir el nivel para poder destacar como lo hacía meses atrás.

Pese a que gran parte de su cuerpo estaba agotado durante el trabajo, poco a poco su cuerpo se empezaba a acostumbrar a las largas horas de entrenamiento, mejorando su resistencia.

Cuando salió de su trabajo las calles de New York estaban meramente iluminadas con las farolas de la calle y la luz que sobresalía de algunas ventanas, tal vez no vivía en la mejor área de la ciudad pero ante sus ojos todo en ella era hermoso.

Al llegar a su departamento Amanda, la mejor amiga y roomie de Kristen estaba cómodamente sentada en el sofá de la sala con una manta sobre sus piernas y una taza sobre sus manos mientras miraba algún programa en la televisión.

- Hola ¿Cómo te fue? ¿Apareció la chica misteriosa?

- Hola, y no, estoy empezando a darme por vencida a decir verdad - responde cansada mientrad deja el saco ajeno en el respaldo del sillón en dónde estaba su amiga.

Se dirige a la cosina a buscar un poco de agua y a calentar su cena, sin darse cuenta que su amiga con curiosidad empieza a revisar dicho saco con detenimiento. Se veía que era de un material de calidad, reviso los bolsillos en busca de alguna pista de la dueña, hasta que llegó a la etiqueta de este. Sorprendida tomo su teléfono para poder encontrarlo en internet.

- ¡Kristen! ¡A caso esa chica era millonaria! - expresa con sorpresa.

- Por qué lo dices - dice al salir confundida de la cosina para sentarse al lado de su amiga.

- Pues como me explicas que está mujer estaba usando un saco Versace de tres mil dólares para ir a un café en los suburbios de New York - responde exaltada mientras le muestra una imagen de la última colección de dicha marca en dónde apareciar el saco junto a su impresionante precio.

Si esa chica hubiera decidido cobrarle el saco probablemente ahora estaría en bancarrota por su descuido en dónde ensucio una prenda tan cara, sin contar en hecho de que ella ya la había lavado con sus propias manos.

Pero al parecer esa desconocida había tenido piedad con ella.

- Por Dios - dijo sin poder creerlo.

- Sabes que es lo más sorprendente.

- ¿Que cosa? - se voltea a ella para poder mirarla.

- ¿A qué se dedica? Debe tener mucho dinero si puede pagar un saco así y aún más como para poder dejarlo olvidado en alguna cafetería.

Su amiga tenía razón.

- Con cada día que pasa solo tengo más curiosidad por ella.

- Sin duda, a decir verdad, tu chica misteriosa tiene muy bien merecido su nombré - bromeó mientras sobaba la espalda de la chica aún consternada.

Su amiga le acababa de dar una nueva razón para tener una vez más insomnio en la noche.



¡Hola! No quise dejar pasar tantos días sin actualizar, así que aquí les traigo el nuevo capítulo de Bad Blood. Espero que lo hayas disfrutado.

No olvides decirme en los comentarios que te pareció o dejar alguna sugerencia para el desarrollo de la historia, me interesa saber lo que opinas. Bye

Bad Blood - Taylor SwiftDonde viven las historias. Descúbrelo ahora