CONFLICTING HEARTS|WANDANAT

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Natasha

A pasado todo un mes desde que el, Señor Stark y yo tuvimos nuestra primera charla, en total hemos tenido cinco charlas, le he comentado la mayor parte de traumas y problemas que tengo, también le he contado parte de mi vida en general, sin contar los problemas y eso, nos hemos hecho buenos amigos, por así decirlo

En este último mes, los problemas con mi padre siguen, siguen para peor, pero trato de no darles tanta importancia, cuando la verdad si la tiene

Mi amistad con Wanda es buena, me hace compañía, hablamos y almorzamos juntas, incluso salimos, fuimos a cenar, me dijo que había probado unas hamburguesas que le gustaron demasiado y me llevo

Y con Clint siempre estamos mejor que nunca

Hoy voy a volver a platicar con el señor Stark, pero por ahora estoy comiendo un rico sándwich

— Hola, Nat — Wanda me saluda

— Hola, Wanda, ¿Que tal? — sonrió

— Más que bien ahora que te veo

Me sonroje, ¡Porque siempre saca comentarios así!

No es queja, si no que yo soy muy seca

— Me alegro de que estés bien, y también de que soy útil para mejor tu día

— No eres útil solo para eso, eres útil para muchas cosas — se sentó a mi lado — ¿Que tal va el tuyo?

— Bien, si, bien — murmure dirijiendo mi mirada a ella — como siempre pues

— Mmm, okay — se recargo en el árbol — ¿Que lees?

— Es una investigación que hice, es de una tarea del maestro Banner

— ¿Y te salió bien?

— Eso creo — Wanda rodó los ojos y se puso derecha — ¡No! Tienes que contestar que te salió exelente, Nat

— Pero si no estoy segura de eso, el maestro...

— Precisamente, tienes que estar segura — murmuró una Wanda muy frustrada

— Me salió increíblemente bien — dije sarcástica

— Pero dilo de verdad. — suspiro — El señor Stark debe de hablar contigo sobre eso

— ¿Sobre que?

— Pues es que nunca te sientes segura de algo que tú haces, siempre te acomplejas

— No lo sé, tal vez

¿Cómo le digo que mi padre fue uno de los principales motivos de mis inseguridades? Es que si, siempre con sus comentarios negativos, remarcando lo malo y no lo bueno

— Espero y hable contigo sobre eso, la verdad

— Pues esperamos

Sinceramente si quiero dejar de ser tan insegura, Clint es igual, siempre me repite que soy increíble en todo lo que hago y que siempre logro lo que me propongo, pero yo solamente pienso que es suerte, pues la verdad nunca he recibido un comentario positivo que no sea de Clint, Wanda, Yelena o el señor Stark, mi padre lo único que hace es gritarme y reprocharme que soy una pésima hija, y mi madre, que en paz descanse, nunca fue muy expresiva, y eso lo entendía, pues ella no creció en una familia muy amorosa, pero ella siempre trato de ser una buena madre, y lo logro, siempre me apoyo mucho y se que me amaba, aunque era demasiado raro que lo demostrara, pero se sentía, en cambio con mi padre no, estoy 100% segura de que me odia, yo quería ir a una escuela de arte y lo único que hizo fue decirme que par que iba si solo voy a gastar el dinero a lo tonto ya que yo no soy buena en eso, yo le di la razón y ya. Yo nunca le he dicho que vaya a clases de como ser un buen padre, y está más que claro que las necesita

— ¿Siempre piensas demasiado? — pregunto Wanda logrando sacarme de mis pensamientos

— De vez en cuando, ¿Porque?

— Por qué te quedas viendo a un punto fijo, sin apartar la mirada, sin pestañear, así, nada más mirando ese punto — explico mirando al punto en el que yo estaba perdida

— No te voy a negar, si pienso mucho, en muchas cosas, y es algo que estoy viendo con el señor Stark — Admití

— Me alegro que estés viendo ese asunto con el señor Stark — suspiro — Las pláticas con el si te están ayudando

¿Cómo?

— ¿Perdona?

— Que si te están ayudando, antes tu apenas y curzabas palabra conmigo, y ahora hablamos muy seguido y mucho

— Bueno, tiene razón

— Ya lo sé, yo siempre tengo la razón

Gire los ojos

— ¿Hoy vas a hablar con el Señor Stark?

Asentí

— Si, pero es unas horas más

— Okay, muy bien, tengo tiempo de seguir hablando yo contigo — giro su rostro hasta verme a los ojos

Tiene unos ojos muy lindos, grandes y un verde muy intenso

Son unos buenos ojos, están como para perderme en ellos

— Tienes unos ojos muy lindos — solté de repente — ¿Ya te lo había dicho?

Soltó una pequeña risita mientras negaba

— No, no me lo habías dicho. Gracias