Mi corazón es tuyo (Sanemi x Nezuko)

en un abrir y cerrar de ojos

-¡CLARO QUE NO!

Le gritó su hermano al ver qué Nezuko estaba de insistente.

Desde que llegó de las aguas termales inició una breve conversación en donde le pedía que le dijera ¿Que clase de aroma desprendía shimazugawa al verla?

Por supuesto, Tanjiro no se lo diría, ya que consideraría inapropiado, además, de verdad no quería que Nezuko se liara con Sanemi. Era extraño, jamás había pensado mal de alguien, le agradaba, pero de lejos.

-¡¿Por qué me pides estás cosas?!

-¡Porque eres mi hermano! -le gritaba mientras Tanjiro estaba dándose una ducha. -ademas, yo no puedo preguntarle directamente.

-Nezuko. —calmó su entonación. —mira, debemos tener "la...

La jovencita levantó una ceja en señal de incomprensión.

—charla...

—¿La charla?

Tanjiro respiró profundamente.

—Si, la charla... —cerro ambos ojos: manteniéndose firme mientras estaba en la enorme tina. —veras, como tú hermano mayor, debo velar por nuestro linaje sanguíneo.

Nezuko comprendió, ahora tenia sentido.

—pff..pfff..  jajajaja, hermano, ¿Qué dices? —reía con añoranza. —Sabes, no estoy escogiendo esposo, solo... Tal vez... —se sonrojaba al pensar en las posibilidades del pelo blanco a la par en la que sus índices chocaban entre si.

El pelo Borgoña se sentía incómodo, no por el hecho de que iba a tener una conversación "adulta" con su joven hermana, simplemente era que está lo había interrumpido en pleno baño.

—Nezuko... —llamó mucho más tranquilo. —¿Podríamos tener está conversación en un lugar... Más decente? —susurró mientras salía de la tina y se ponía una gran bata. —Ya casi es la hora de dormir, ¿Por qué mejor no lo discutimos mañana?

La chica entrecerró ambos ojos.

—Y... ¿No quieres saber lo que Kanao opina de ti, hermano?
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Mi corazón es tuyo.
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Sanemi estaba que se moría.
Desde que llegó de su caminata: kotetsu no dejaba de hostigarlo con saber quién era la chica a la que le gustaba.

Por supuesto, Sanemi no le diría que se trataba de la joven Kamado ya que, razonándolo bien: a ella le gusta él, pero a él no le gusta ella. Además, sabía que Zenitzu estaba colado por ella y si de por si el rubio se infartaba de verla con otro hombre, quería evitarse el problema de un enfrentamiento.

—Entonces... ¿Me dirás quien te tiene flechado?

—¡déjame, mocoso, no te diré ni un carajo!

Sanemi no se sentía a gusto con aquel comportamiento tan insinuante de Kotetsu, ¿Qué ganaría con decirle?
No tenía sentimientos hacia Nezuko, ¿Verdad? Solo habían sido dos ocasiones y en esas dos ocasiones le hizo experimentar:
«—Sentimientos encontrados. —» recordó a Tanjiro decirle eso y se sintió abofeteado.

—sabes, el gesto que me diste dice todo lo contrario —le afirmaba dando leves asentidas...

Era verdad que no podía ocultar que se enamoraba fácilmente, eso ya era un hecho en él, pero tratando de la hermana de Tanjiro, haría un esfuerzo para solo mirarla como conocida, ya que estos dos estaban en términos complicados.

—¿Tienes curiosidad de quién se trata? —preguntaba ya con el gesto fastidiado.

—¡Si!

—Bueno, a mi ella no me gusta...