Tras una fallida misión de rescate donde no solo perdió a su escuadrón completo, a los rehenes que debía salvar sino también perdió el brazo derecho, el ahora retirado soldado Giyuu Tomioka regresa a casa para recibir rehabilitación en un hospital e...
Importante leer: Estoy realizando un cambio a la dinámica de mis historias lo cual significa doble esfuerzo pero creo que vale la pena, y será la siguiente:
Se subirán capítulos en Wattpad con versión censurada y en AO3 sin censura, podrán leer la que gusten, tratando de no dejar a nadie sin la experiencia de continuar leyendo.
Bonus: En AO3 irán 3 capítulos avanzados a la versión de Wattpad para poder cuidar la censura.
Sin más, espero que les guste esta nueva historia. Atte. su autora IzakaAi<3
Las publicaciones son los domingos por la tarde.
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La potencia de fuego, balas, misiles y bombardeos, la guerra es el peor infierno en la tierra, al menos lo es para los soldados que batallan día a día en el medio de la guerra, intentando dar un poco de paz en una tierra que no es suya, es difícil y hasta inverosímil, pero fue elección.
—¡Capitán! ¡Maldita sea! ¡No sé rinda! Vamos...
Las voces se escuchaban a lo lejos, casi apagándose, el sonido fuerte de una granada lo había alcanzado, era una misión de rescate de rehenes, las había hecho muchas veces, su escuadrón era especialista en ello, pertenecer al ejército de las Naciones Unidas ya era un logro personal, el deseaba estar ahí, salvar vidas, pero ese fatídico día no fue así, fue el día que no logró poner a salvo a sus compañeros, fue el día que lo perdió todo.
—Está perdiendo mucha sangre.
—¡Maldición! ¿Alguien lo encontró?
—Lo siento, Mayor no lo encontramos.
—Esto es una maldita mierda, vámonos ya...
El camión blindado comenzó a moverse para regresar a la base, en cuanto llegaron fueron directo al hospital donde fue atendido.
—¿Es Tomioka? No puede ser, traigan 4 unidades de O negativo, preparen el quirófano, ya mismo...—ordenó la médico cirujano de la base—.Soldado Tomioka...Giyuu ¿Me escuchas?...esto es un desastre, ¿lo encontraron?
—No, dijeron que el fuego enemigo era intenso, no pudieron pararse a buscarlo.
—¡Maldición! ¿Hay más sobrevivientes?
—Mayor, ya no quedaba nadie...
Escuchaba voces lejanas, no entendía nada, no sabía cómo llegó ahí, solo el dolor que lo invadía y las imágenes borrosas de lo que ocurrió, finalmente se fue.
Seis meses después...
"Cuando vuelvas a Japón debes ir a verlo, solo tienes que decirle que eres mi amigo, y te ayudará, el ejército ha sido tu familia durante mucho tiempo, ahora es cuando puedes buscar otro camino, empezar de nuevo, y no olvides que eres más de lo que ves en el espejo..."
