Un sueño

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por alguna razón Juan se encontraba en un lugar oscuro y aterrador,pero por alguna otra razón sentía su espalda acurrucada en un cómodo lugar,supuso que quizás sería su cómoda y acogedora cama,pero sospechaba del lugar oscuro donde se encontraba.

Sus ojos vagaban por cada esquina de aquel lugar pero su cuerpo no se movía ni un centímetro,pareciera como si estuviera en un parálisis de sueño,algo que ya le a pasado y casi se a cagado de miedo con solo recordar,pero este se sentía demasiado real como para ser mentira,incluso su piel se enchinaba por aquel frío que había en el lugar.

Alzó la vista y notó un techo oscuro,gracias a eso tuvo la conclusión que probablemente estaba en una habitación a oscuras pero no sabía el porqué,simplemente está congelado sin poder mover sus manos o piernas.El cuerpo de Juan estaba muy rígido más de lo normal,en un momento de pensamientos una luz se encendió mostrando la gran habitación en la que se encontraba,la piel del castaño de enchino como nunca al ver el lugar,era como un motel de un lugar lujoso que nunca había visto en su vida,aunque era claro ya que era virgen y nunca se atrevió a entrar a este tipo de lugares íntimos.

La puerta del fondo se abrió lentamente dejando ver una sombra que dio pasos adelante dando la gran revelación de su apariencia,su altura era increíblemente alta,sus pestañas estabas enchinadas y además aquellos ojos negros afilados se podían ver ante la luz,pero algo que llamó la atención de Juan haciendo que este abriera los ojos fue que aquel chico estaba solo en bóxers,su abdomen,pectorales y torso estaban expuestos por completo a Juan quien tenía las mejillas ruborizadas sin saber lo que ocurría.

Aquel chico dirigió su penetrante mirada a él castaño quien tragó fondo al no poder moverse ni un centímetro del lugar.

—despertaste,me alegro—dijo con confianza y firmeza

El chico se acercó hasta la orilla de aquella cama en la que Juan estaba recostado con nervios,la frente de Juan estaba empapada de sudor y nervios al poder ver aquella espalda tan trabajada de aquel chico misterioso.

—he pensado que quizás me reconozcas,pero al poder ver esa expresión en tu cara supongo que no recuerdas aquel cuerpo del que tanto te aferraste esa noche en la fiesta.

Exclamó.

Juan frunció su ceño completamente confundido por las palabras de aquel chico misterioso,ni siquiera sabía de lo que estaba hablando,pero por alguna razón esa apariencia se le hacía bastante conocida de algún raro lugar donde estuvo antes.

—dime algo,¿Me as reconocido entre tantas personas?

El castaño solo se quedó callado y lo miró fijamente con una expresión "rara",estaba en un parálisis de sueño así que claramente no podría abrir sus labios para dejar salir aunque sea una letra.El chico misterioso solo lo observo recordando que este no se podía mover.

—cierto,no puedes hablar,qué pena—hablo con claro sarcasmo.

—pero solo quiero que reconozcas una sola palabra de lo que dire

Antes de que aquel chico hablara Juan ya lo había reconocido,aquellos rasgos tan definidos y oscuros eran de una sola persona...ese chico popular llamado Iván del cual se le enchinaba la piel con tan solo recordarlo.

Ahora "Iván" inclinó su cara a la cabeza de Juan,dirigió aquella mano hacia aquel torso desnudó de Juan...torso desnudó? Juan no tuvo en cuenta que estaba acostado en esa acogedora cama sin ninguna prenda que pudiera cubrir su pecho y abdomen.Su cuerpo se estremeció al sentir las manos tan definidas y masculinas de Iván quien deslizaba sus dedos por el torso de Juan hasta llegar a su pecho.

Ojos de canela [spruan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora