Mr. Heterosexual [Chestappen]

Capitulo 6

Max se detuvo, sintiendo el nudo en la garganta mientras pensaba en lo que quería decir. Miró a Sergio, quien lo observaba con atención, esperando su solicitud.

—Quería preguntar si me podías dar clases aparte... quiero aprobar biología este año y necesito tu ayuda —pronunció Max, sus palabras salieron algo nerviosas y titubeantes.

Sergio sonrió, claramente conmovido por la sinceridad de Max.

—Por supuesto, Max. Estoy aquí para ayudarte en lo que necesites. Podemos organizar sesiones de tutoría después de clase si te parece bien —respondió Sergio con una sonrisa tranquilizadora.

Max sintió un alivio instantáneo al escuchar las palabras de Sergio. La tensión en sus hombros se disipó un poco y su nerviosismo comenzó a transformarse en gratitud.

—¡Gracias, señor Pérez! —exclamó Max, con una sonrisa de gratitud. —Eso significa mucho para mí.

Sergio asintió comprensivamente.

—No hay de qué preocuparse, Max. Estoy aquí para ayudarte a tener éxito en biología y en cualquier otra materia en la que necesites apoyo —dijo Sergio con sinceridad. —¿Te parece bien empezar mañana después de clase?

Max asintió vigorosamente.

—Sí, eso sería genial. Gracias de nuevo, señor Pérez.

Sergio le dedicó una última sonrisa antes de despedirse, y Max salió del despacho sintiéndose un poco más ligero. Mientras caminaba hacia la salida, su mente divagaba entre los estudios y la inesperada atracción que sentía por Sergio. Se decía a sí mismo que era solo una admiración por su amabilidad y profesionalismo, pero sabía que había algo más, algo que aún no estaba listo para admitir por completo.

Al encontrarse con Charles en la salida, Max le contó sobre la conversación con Sergio y las sesiones de tutoría que habían acordado. Charles sonrió de manera comprensiva y le dio una palmada en el hombro.

—Buena suerte con las clases extra, Max. Estoy seguro de que lo harás bien. Y, quién sabe, tal vez descubras algo más sobre ti mismo en el proceso.

Max se rió nerviosamente, sin saber cómo responder a esa última observación de su amigo. Pero en el fondo, sabía que Charles tenía razón. Estas sesiones de tutoría no solo serían una oportunidad para mejorar en biología, sino también para explorar los confusos sentimientos que Sergio despertaba en él.

—No creo que sean sentimientos amorosos, dejemos este tema. Cuéntame cómo te fue con el señor Sainz —dijo Max, sonriendo de lado y molestando a Charles, consciente de la tensión entre Charles y el señor Sainz, aunque este no lo mostrara.

Charles se ruborizó ligeramente y desvió la mirada, pero no pudo evitar sonreír.

—Pues, fue bien... —respondió Charles, tratando de no parecer demasiado emocionado. —El señor Sainz es un gran profesor, muy paciente y claro con sus explicaciones.

Max arqueó una ceja, sabiendo que había algo más en la historia.

—¿Solo eso? Vamos, Charlie, sé que hay algo más —insistió Max, disfrutando de la oportunidad de molestar a su amigo.

Charles suspiró, dándose por vencido.

—Bueno, tuvimos un momento... —admitió finalmente. —Nada serio, solo que él me corrigió muy de cerca, y no sé, sentí algo de tensión. Pero seguro que estoy imaginando cosas.

Max sonrió ampliamente, sabiendo que su amigo estaba tratando de restarle importancia a la situación.

—Aprovecha las clases, Charlie. Quién sabe, tal vez el señor Sainz también sienta algo por ti —dijo Max en tono de broma.