2

122 8 0
                                    

- ¿No estabas en una conferencia?

- Termino más rápido de lo que creíde echo. Aun que varias de mis empresas están teniendo perdidas y me están dando dolor de cabeza

- Vaya idiotas contrataste, todo el mundo es igual

- Andrés por favor no digas eso

- Yo digo lo que se me da la gana, así que no me digas que hacer

Rubén solo pudo dar un suspiro profundo, sentía que ya no podía hacer nada para corregir a su hijo.

- Por cierto, mañana te presentare tu nuevo guardaespaldas, luego de que despidieras al otro por no evitar que un fan te diera un abrazo

- No me recuerdes a ese idiota, hizo terrible su trabajo

- Ay dios mío, dame paciencia por favor

Una vez que llegaron a la mansión, Andrés se bajó del auto sin decirle adiós a su padre y como de costumbre se encerró en su habitación, tiro su teléfono a la cama y le echo una mirada a la nada.

- Espero que no sea malo como los demás vulgares que son todos y siempre lo serán, como ella lo fue conmigo

Una vez luego de cenar y vestirse se quedó dormido, preguntándose como seria su nuevo guardaespaldas. A la mañana siguiente él se levantó y como no tenía nada que hacer ese día no quiso levantarse de la cama, pero un sirviente lo llamo.

- Buen día señorito Andrés, quería informarle que su padre lo llama

- ¡Mierda! El nuevo guardaespaldas ¡Que pereza!

Andrés se puso lo más elegante que pudo y bajo hasta el salón principal donde se encontraba su padre.

- Buen día hijo ¿Como dormiste?

- Mas te vale no haber contratado a un bueno para nada

- Hijo por favor compórtate y no seas grosero con el

- Solo terminemos esto de una maldita vez

Rubén nombro el nombre del nuevo guardaespaldas que entrara al salón y así el tipo empezó a acercarse a ellos.

Andrés observo y se quedó sorprendido por el nuevo, tiene un cuerpo musculoso y venia con un traje elegante y negro y con corbata, pero lo que más hipnotizó al chico fue el rostro del contrario, tenía unos hermosos ojos bicolores, el cabello café y con mechones rojizos. Simplemente muy guapo, alto y se veía muy serio y calmado. A diferencia de los otros que entraban temblando como gelatinas al estar al frente de altas personas de poder.

Andrés sintió un alto rojizo en sus mejillas y como el corazón se le aceleraba tan solo el otro se le acercaba.

- Hijo te presento a tu nuevo guardaespaldas

El otro hizo una reverencia demostrando un alto respeto

- Buenos días señorito Andrés, déjeme presentarme soy Ari Gonzalo Coronel Vera, su nuevo guardaespaldas, es un inmenso placer trabajar para usted y su padre

Andrés se quedó mudo, no sabía que decir a tal guapo hombre que tenía en frente.

- ¿Hijo? ¿Te pasa algo?

- Eh no nada, padre podemos hablar a solas

- Claro, lo que quieras ¿Ari nos deja solos por favor?

- Como ordene señor

Ari dio media vuelta y se retiró del lugar, dejándolos solos nuevamente.

- Por favor no me digas que quieres despedirlo, tan solo te estar unos minutos aquí

- ¿Por qué mierda trajiste a un tremendo dios hermoso sin decírmelo? Me hubiera puesto otra ropa

- ¿Que?

- Es que no lo viste, es tan guapo y perfecto, él podría ser mi novio

- Oh claro que no, apenas lo conoces y además si quieres tener pareja será una chica ¿Entiendes hijo?

- Pero ninguna de las feas chicas que me han presentado se iguala a ese hombre

- ¡Hijo! He dicho que no

- Vale, vale

- Bueno, me tengo que ir. Le diré algunas cosas y ya estará a tu servicio ¿Bien?

- Si, si

Su padre ya estaba alejándose cuando Andrés dijo algo en broma y también un poco cierto.

- Dile que, si necesita una noche de pasión, yo estoy disponible

- ¿Qué dijiste?

- Nada, nada






Él Nuevo Guardaespaldas ❤️💙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora