Difícil de olvidar || ChenMin

11. Lista de sospechosos

MinSeok y JongDae están caminando por el campo, Daeul ha ido de visita con la abuela. La madre de MinSeok está feliz de que JongDae ya sepa la verdad. Le dio un fuerte abrazo. Todavía se sigue sorprendiendo de ser tan querido.

El campo ha resultado terapéutico para el alfa, el aire limpio y fresco le alegra el corazón, además de caminar de la mano de su precioso esposo. JongDae está totalmente perdido en la conversación de su esposo. Esos bonitos labios jugosos y rosados que le hacen perder la concentración. Es que le gustan mucho, saben muy bien.

—¿Me estás escuchando? —MinSeok suelta su mano y se cruza de brazos.

El omega ha estado hablando como un tonto porque su marido no le ha prestado atención en lo absoluto.

—Me dijiste algo de Daeul, ¿no? —es lo único que puede pensar.

MinSeok bufa.

—Te estoy diciendo que la relación entre KyungSoo y JongIn está muy tensa y que deberíamos hacer algo —sólo puede pensar en que ha estado hablando como perico —. ¿En qué pensabas tanto que no me prestaste atención?

MinSeok se sienta en una piedra que está bajo la sombra de un frondoso árbol. Toma una manzana y la muerde molesto. JongDae se sienta a su lado.

—Pienso en tus labios —le roba un beso que inmediatamente es correspondido.

Se separan al ver pasar a un grupo de niños que van al río a refrescarse. De hecho, donde están es un camino muy transitado por los habitantes. Ahora vieron unos niños, pero en pocos minutos verán familias, parejas o amigos dirigirse al río.

JongDae corta flores silvestres y adorna el cabello de MinSeok con ellas.

—También pienso en algo que me tiene inquieto —dice no muy convencido de si lo que va a decir es correcto.

MinSeok lo nota.

—Dime, nos tenemos confianza —el omega besa la mano de su marido.

Su matrimonio se basa en el amor y la confianza.

—¿Extrañas al antiguo yo? —JongDae pregunta jugando con sus dedos.

MinSeok está sorprendido y se puede notar en su expresión. Lo piensa un poco.

—No has cambiado, sigues siendo el mismo alfa de siempre, del que me enamoré —el omega pone la mano del contrario en su mejilla —. Sólo que me gustaría que recordaras parte de nuestra historia.

El hombre de ojos felinos mete sus manos entre sus piernas un poco avergonzado de sus palabras, tampoco quiere que su marido piense que no lo disfruta. Ahora que ha perdido la memoria es como si volvieran a enamorarse. Bueno, al menos MinSeok reafirma su amor. MinSeok se siente muy feliz de que su marido lo haya vuelto a elegir sin dudarlo.

—No te agobies, poco a poco estás recuperando la memoria y cuando menos lo pienses, recordarás todo —MinSeok le dice sosteniendo su cara para darle un par de besos.

JongDae lo sostiene de la cintura. Se siente tan cálido y correcto estar con su omega.

—Estoy comenzando a recordar el día de mi accidente —JongDae le confiesa.

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JongDae visita a SeungJae, quiere enfrentarlo por haberle mentido aquella vez, no fue para nada grata su ayuda, si es que pretendía ayudarlo. Tampoco puede dejar pasar que SeungJae le ha asegurado que son buenos amigos. Sin embargo, el hombre de sonrisa felina se mantiene al margen. Vienen diversas preguntas a su mente, ¿él lo habrá traicionado?, ¿cuál sería su motivo?, ¿por qué si era su amigo decidió matarlo?

—Así que estás aquí —SeungJae está desenterrando unas zanahorias.

Saca algunas que están comidas por unos conejos.

—Mira, ese conejo de allá no deja de comerse mi cosecha —le señala un conejo que se encuentra al final del terreno comiéndose una zanahoria con descaro.

—¿Cuál fue el motivo de tu mentira? —JongDae pregunta.

Actúa precavido.

—¿No te lo dijo MinSeok? Lo hice para que ya no te estuvieran mintiendo —SeungJae le dice serio —. No parecías estar evolucionando, lastimabas a tus hermanos, a MinSeok y a ti mismo.

SeungJae sabe eso porque JunMyeon y JongIn le dijeron.

—¿Por qué inventar una mentira? —JongDae insiste.

—Era la manera en la que MinSeok podía decirte la verdad —se encoge de hombros —. Eres mi amigo, no podía verte así. Ni siquiera me recordabas.

Habían sido amigos desde la infancia.

—Incluso tu esposo sospecha de mí —se señala —. JongDae, yo no soy tu enemigo. De hecho, ¿quién no asegura que fue tu propia familia o esposo…?

JongDae lo sostiene de su camisa y le da un golpe en el rostro.

—No vuelvas a acusar a mis hermanos o a MinSeok, me oíste porque voy a dejarte como una masa sangrante —JongDae lo amenaza.

—Lo siento, no quise decir aquello. No sabía lo que decía.

SeungJae sabe que no debió decir eso, pero él también tiene una lista de sospechosos. Espera que la conversación no arruine su amistad.

Por la noche, JongDae está recostado en un sofá teniendo a MinSeok en su regazo. Están desnudos, JongDae tan dentro de MinSeok, el omega gime su nombre. Besos intensos comparten.

—No confío en ese hombre, él te ha estado metiendo ideas a la cabeza —MinSeok sostiene su rostro para darle muchos besos.

Es embriagante.

—Sospecho de él, él ese día no estaba por ninguna parte…

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Daeul ríe al ver a sus papás peleando amistosamente por ponerle un cambio de ropa. JongDae quiere ponerle un conjunto verde y MinSeok uno rosa. Está en la cama esperando a que sus padres se decidan.

—Esta bien, será el verde, sólo porque Daeul lo señaló —MinSeok se rinde.

Escucha que tocan el timbre.

—Iré a ver —MinSeok sale de la habitación.

Al estar en la puerta principal se encuentra con su amigo que les ha traído algunos objetos y comidas de su viaje.

—¿Por qué ese rostro tan feliz? —pregunta HwaSung —. ¿Interrumpo algo?

—No, no —hace un ademán negando —. Sólo estaba jugando con JongDae.

—Veo que estás muy enamorado de él, se ven tan felices… —HwaSung dice con una sonrisa.

—Sí, nos amamos mucho —MinSeok tiene una reluciente sonrisa —. Hacemos actividades que le hacen recordar a él y al mismo tiempo encienden más la llama de nuestro amor.

HwaSung sólo asiente.

—¿Y ya recuerda el día de su accidente? —pregunta.

—Todavía no —miente. No es momento de que todos se enteren.

JongDae baja con Daeul en brazos. HwaSung le sonríe, el alfa le devuelve el gesto, pero lo hace con menos intensidad.

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Hola, hola, ¿cómo están?
Espero que de maravilla.

Cada vez crecen más las sospechas.

Gracias por leer!