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advertencia: contiene sexo. contiene g!p. 

"fallen angel fangs"

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"fallen angel fangs"

Ella es caliente. Mas caliente que el jodido infierno entero. . .

Charlie lo sabia, eso la hacia desearla aun mas. Ahora era un desastre de emociones, Vaggie la mantenía deseosa de tacto, estaba impaciente. La demonio estaba sobre la cama sentada con las piernas abiertas, las caderas elevadas y semi desnuda, solo una fina tela de lencería cubría su mojado coño.

Por otro lado Vaggie estaba en el baño, su mirada fija en el reflejo del espejo ¿realmente era ella suficiente para Morningstar? Nunca había sentido inseguridades de este tipo antes, pero ahora se encontraba cuestionándose si realmente podía satisfacer a su novia, especialmente después de que Charlie quisiera llevar su relación a un nivel físico más intenso.

Por su padre lucifer . . . Charlie se estaba empezando a desesperar, apretó las sabanas debajo de ella. Necesitaba a Vaggie, su mano bajo hasta su propia intimidad buscando alivio temporal para su deseo insaciable, lentamente acaricio su propia excitación soltando jadeos en el proceso. Imaginaba que sus propios dedos eran los de su amada, sus labios emitieron un suave gemido que se deslizó por la habitación como una caricia invisible.

Finalmente, Vaggie salió del baño y se encontró con la escena frente a ella. Sus ojos se encontraron con los lujuriosos ojos de Charlie, ambas compartiendo el mismo deseo ardiente. Sin decir una palabra.

La morena se sorprendió de la forma en la que Charlie —sin decir nada— la miraba de manera tan dócil. La princesa del infierno era una mujer después de todo, una mujer muy ardiente hija de Lucifer y de la primera mujer creada, ella era el pecado mas hermoso de todos. Podría jurar ver en sus ojos una mezcla de sumisión, lujuria, fragilidad y deseo desenfrenado.

Vaggie trago saliva, su cuerpo respondió antes que su cerebro. Se acercó a la cama y se arrodilló entre las piernas de Charlie, acariciando su muslo con delicadeza antes de quitar la fina tela que la separaba del placer que tanto anhelaba.

Sin hacer mas esperar los labios de Vaggie encontraron el centro de la lujuria de Charlie, provocando gemidos y espasmos de placer en su amante. Aferró las sábanas con fuerza, arqueando su espalda. Los gemidos de ella eran como una llamada irresistible que incitaba a continuar explorando sus deseos más profundos.

—Vaggie. . . por favor. . . —suplico Charlie, la lengua de su pareja la estaba arrastrando a el punto mas alto del éxtasis. Se aferraba a las sabanas de la cama como si su vida dependiera de ello. Sin su permiso, su forma demoniaca salió a la luz, automáticamente su cola enrollo el torso contrario mientras gemia soltando lagrimas del mas puro placer.

Vaggie obedeció, aumentando la intensidad de sus caricias y movimientos con cada gemido y suspiro de Charlie. La pasión entre ellas era ardiente y desenfrenada, un fuego que las consumía por completo.

MY ANGELIC DEMON.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora