𝐒𝐰𝐞𝐞𝐭 𝐁𝐥𝐨𝐨𝐝 || Hyunlix || En edición

「𝓐 𝓵𝓲𝓽𝓽𝓵𝓮 𝓼𝓾𝓻𝓹𝓻𝓲𝓼𝓮」

Félix y Hyunjin habían pasado varios días sin hablar después de una discusión que había llevado a una ruptura en su relación. Sin embargo, Félix había decidido perdonar a Hyunjin y quería reconciliarse. Así que, un día, en casa de fue a ver a Hyunjin con una sonrisa y un corazón lleno de amor.

Después de reconciliarse, Hyunjin decidió ir a hablar con Chaewon, su amiga, para reclamarle por haberle mentido sobre Félix. Chaewon, sorprendida por la visita, se defendió argumentando que solo había querido proteger a Hyunjin.

—No entiendo por qué me estás acusando, Hyunjin. Solo quería ayudarte —dijo Chaewon, con una voz defensiva.

—No me estás ayudando, Chaewon. Me estás metiendo en problemas y no me dejas tomar mis propias decisiones —dijo Hyunjin, con firmeza.

Chaewon se dio cuenta de que había ido demasiado lejos y que Hyunjin tenía razón. Se disculpó y prometió no interferir más en su relación con Félix.

Después de la conversación con Chaewon, Hyunjin se acercó a Félix y le pidió que adoptaran un perrito. Félix, emocionado por la idea, comenzó a planificar todo lo relacionado con la adopción.

—¡Vamos a llamarlo mmm no se..._ Oh? Ya se, que tal kkaami? —dijo Félix, emocionado.

Pero Hyunjin se negó.

—No, Félix. No quiero un perrito —dijo Hyunjin, con firmeza.

Félix se sintió desilusionado y comenzó a llorar. Hyunjin se sorprendió al ver a Félix llorar, ya que no era común verlo así.

—¿Qué pasa, Félix? ¿Por qué lloras? —preguntó Hyunjin, preocupado.

—Porque no entiendo por qué no quieres el perrito. Es algo que siempre has querido y ahora no quieres —dijo Félix, con un tono de frustración.

Hyunjin se dio cuenta de que Félix no era así y que su estado emocional era un reflejo de su propia sensibilidad. Se acercó a Félix y lo abrazó.

—Lo siento, Félix. No quiero el perrito porque no estoy lista para cuidar de un animal. Pero no es por ti, es por mí —dijo Hyunjin, con sinceridad.

Félix se calmó un poco y se dio cuenta de que Hyunjin tenía razón. Se disculpó por su reacción y prometió ser más comprensivo en el futuro.

—Lo entiendo, Hyunjin. Lo siento mucho —dijo Félix, con un abrazo.

...

Félix se despertó con un dolor agudo en el pecho y un malestar generalizado. No sabía qué le pasaba, pero sentía que algo no estaba bien. Intentó ignorar el dolor y seguir con su rutina diaria, pero el malestar persistió. Al final, no tuvo más remedio que llamar a su prometido, Hyunjin, para que lo llevara al doctor.

—Hyunjin, necesito que vengas a buscarme. No me siento bien —le dijo Félix con voz débil.

—¿Qué pasa, amor? ¿Qué te duele? —preguntó Hyunjin con preocupación.

—No sé. Me duele el pecho y me siento muy débil. Creo que es mejor que vaya al doctor —respondió Félix.

Hyunjin llegó rápidamente y lo llevó al consultorio médico. Félix se sentía cada vez más débil y se desmayó en el consultorio. Hyunjin se preocupó mucho y llamó a una ambulancia para que lo llevaran al hospital.

—¿Qué le pasa, doctor? —preguntó Hyunjin a un médico que se acercó a ellos.

—No sé aún. Pero necesitamos hacer algunos análisis para determinar el origen del problema —respondió el médico.

Después de varios análisis, el médico regresó con una expresión seria.

—Félix, tienes un embarazo de dos meses —dijo el médico.

Félix se sentó en la cama, asombrado y confundido. Hyunjin se acercó a él y lo abrazó.

—¿Qué? ¿Estás segura? —preguntó Félix, tratando de procesar la noticia.

—Sí, estoy segura. Estás embarazado de dos meses —confirmó el médico.

Félix se sintió abrumado por la noticia. No había planeado tener un bebé tan pronto. Hyunjin lo abrazó y la consoló.

—Estoy aquí, amor. Estoy aquí para ti —le dijo Hyunjin.

—Gracias, Hyunjin. No sé qué hacer —dijo Félix, llorando.

—No tienes que hacer nada. Solo necesitas descansar y cuidarte. Yo estaré aquí para ti —respondió Hyunjin.

Félix se sintió aliviado al saber que Hyunjin estaba allí para él. Comenzó a sentir una mezcla de emociones: sorpresa, miedo y emoción. Sabía que esto cambiaría su vida, pero también sabía que Hyunjin estaría allí para apoyarlo.

—Gracias, Hyun. Te amo —dijo Félix, abrazando a su prometido.

—Te amo también, amor. Estoy aquí para ti —respondió Hyunjin, abrazando a Félix.