Phoenix

Capítulo 12

Dahlia les dio la espalda a los comandantes que estaban en su habitación. No quería hablar de eso, no quería pensar en Umbridge, las muertes de Cedric y Sirius, no quería pensar ni hablar sobre la guerra. Pero eso es lo que querían saber y ella ni siquiera podía culparlos por sentir curiosidad, de todos modos estaba en una posición bastante mala para juzgar. Después de todo, se había metido en muchos problemas con su curiosidad.

"Dahlia, somos tus amigos. Por favor habla con nosotros". Izo insistió

Llevaban casi una hora intentando convencerla de que hablara de ello. Sabían que estaban siendo demasiado tercos con una simple cicatriz, pero era mucho más que eso. Después de todo, si no podía hablar con ellos sobre esto, ¿cómo podría sentirse lo suficientemente segura como para quedarse con ellos? Pero más aún, ¿cómo podría lograr superar lo vivido? Para sanar había que sacar el pus de una herida, aquí pasaba lo mismo, para seguir adelante tenía que afrontar lo que le había pasado. Saca el pus.

Fawkes también estaba del lado de los piratas, como suele ocurrir últimamente, para desgracia de la joven de largo cabello negro. Después de todo, ya tenía suficientes problemas para mantenerlos a raya sin que el fénix se sumara, eso era cierto para los dos fénix, Fawkes y Marco.

Dahlia permaneció en silencio por mucho tiempo, al punto que los piratas pensaron que había decidido ignorarlos por completo, incluso estaban pensando si cambiar de tema o simplemente irse cuando ella comenzó a hablar.

"Durante mi cuarto año en Hogwarts, cuando tenía 14 años, se llevó a cabo un torneo entre diferentes escuelas de magia. Hubo tres, Hogwarts para Inglaterra, el país donde vivía, luego Beauxbatons para Francia, un país vecino, y luego Durmstrang. para Europa del Este, Europa era el nombre del continente en el que estaba, no sabíamos la ubicación exacta de Durmstrang, por eso no puedo darte un país como los otros dos.

Un campeón de cada escuela debía ser elegido mediante un objeto encantado y luego tendría que participar en tres tareas creadas para poder demostrar su valía y su magia. El ganador obtendría la gloria eterna además de mil galeones, monedas de oro. Viktor Krum fue elegido para Durmstrang, Fleur Dellacour para Beauxbatons y Cédric Diggory para Hogwarts.

Lo que los organizadores del torneo no sabían era que un Mortífago, uno de los sirvientes del Mago Oscuro con el que luché, se había infiltrado en las filas de los profesores de Hogwarts y que había logrado hechizar al objeto que servía de juez. La magia que había lanzado había permitido la participación de un cuarto campeón, surgió mi nombre. Tuve que participar.

Tenía 14 años y tuve que competir en tareas realizadas para estudiantes tres años mayores y adultos por lo que ellos también habían recibido un impulso mágico. Basta decir que salí con un hándicap más que importante. Pero aguanté, no quería ganar sólo sobrevivir.

Excepto que con las maquinaciones de este Mortífago me encontré frente al trofeo de la victoria, pero no estaba solo, Cedric también estaba allí. Discutimos durante un tiempo sobre quién debería hacerlo, pero al final lo hicimos juntos. Una decisión que le costó la vida. Lo mataron simplemente porque estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado.

Mi nombre fue ingresado en el torneo para que yo pudiera llegar a manos del Mago Negro para ayudar en contra de mi voluntad en su ritual de resurrección. El torneo fue un buen momento ya que la poción que se iba a utilizar necesitaba que ciertos ingredientes fueran recolectados durante ambos solsticios, la tercera y última tarea se llevó a cabo poco después del solsticio de verano, tiempo justo para que los ingredientes se mezclaran adecuadamente.

Ese día marcó el regreso de Lord Voldemort, pero el gobierno no lo aceptó, así que comenzaron una propaganda diciendo que yo era un mentiroso y que estaba loco. Todo porque no quería afrontar la guerra. El ministro había logrado colocar a alguien en quien confiaba y que le era completamente leal en una posición de poder en la escuela.