𝐶apitulo 6

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El zumbido de las luces de los focos llenaba el estudio de grabación mientras Gustavo y Charly se acomodaban en el sofá, listos para la entrevista. Ambos lucían relajados, aunque una tensión sutil se percibía en el aire.

—Bueno chicos, últimamente han estado en todas partes. Los periódicos están llenos de fotos de ustedes dos juntos. ¿Qué hay de cierto en los rumores? —pregunto el periodista con una sonrisa.

—Ah, ya sabes cómo son los medios. A veces la gente ve lo que quiere ver. —respondio Gustavo riendo.

Charly asistió, con una sonrisa igualmente enigmática

—Exactamente. Somos buenos amigos y colegas, eso es todo.

—Pero ¿hay algo más? ¿Algo que no nos están diciendo? —volvio a insistir el periodista.

Los ojos de ambos músicos se encontraron por un breve instante, comunicando más de lo que estaban dispuestos a admitir. Gustavo suspiró.

—Mira, somos muy cercanos, pero también tenemos nuestras vidas personales. Ambos tenemos novias, yo futura esposa, que respetamos mucho.

—Y estamos enfocados en nuestra música, que es lo más importante para nosotros en este momento. —Añade el otro, con una mirada cómplice a Gustavo.

El periodista asientió, tomando nota de la respuesta

—Entiendo. Cambiando de tema entonces...

Más tarde, después d ella entrevista, Zeta Bosio, el tercer miembro de la banda, miraba fijamente una de las fotos de Gustavo y Charly que había encontrado en una revista. Una sombra de preocupación cruzaba su rostro mientras sus pensamientos se enredaban en sospechas y preguntas sin respuestas.

Zeta se preguntaba a su mismo: ¿Realmente son solo amigos? ¿O hay algo más detrás de esas miradas?

Sus dedos rozaron la imagen de Gustavo y Charly juntos, recordando los momentos en el escenario, la complicidad en las canciones, las risas compartidas. Una parte de él quería creer en la explicación simple de la amistad, pero otra parte no podía ignorar las señales que había estado viendo.

En el mundo del rock argentino, las líneas entre la amistad, la creatividad y el amor pueden desdibujarse con facilidad. Mientras Gustavo y Charly mantenían su versión pública, Zeta comenzaba a conectar los puntos que podría llevar a una verdad mucho más complicada de lo que cualquiera de ellos estaba dispuesto a admitir.

En otra entrevista, el bajista hojeaba distraídamente una revista musical mientras esperaba su turno para la entrevista. Las páginas estaban llenas de fotos de Gustavo Cerati y Charly Alberti, y los titulares destacaban su trabajo fuera y dentro del estudio y sus próximos proyectos. Sin embargo, notó con creciente incomodidad que apenas se mencionaba su nombre o sus contribuciones a la banda.

Se preguntaba a su mismo; ¿Por qué siempre ellos dos?

El resentimiento comenzó a burbujear en su interior mientras recordaba otras entrevistas recientes donde había sido relegado al fondo, como si su papel en la banda fuera secundario. La sensación de ser ignorado, incluso dentro de su propio grupo, lo estaba afectando más de lo que quería admitir.

Zeta se reunió con Gustavo y Charly después de la última entrevista. Aunque intentaba ocultarlo, el resentimiento seguía palpable en su tono de voz mientras se sentaba con ellos.

—¿Alguna vez han notado cómo siempre son ustedes dos los que aparecen en todas partes? Como si yo no existiera. —tiro directo.

—Zeta, no es nuestra intención...

—Perdón si te sentiste así. No lo hacemos a propósito. —intervino Charly.

—Pero así es como se siente. Como si fuera invisible. —dijo frustrado.

𖧧࣪ . ִֶָ๋   𝑵uestra 𝑭e  ₊˚⊹ | 𝘊erati & 𝘈lbertiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora