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Durante ese tiempo no habían vuelto a tener noticias de parte de ese ángel que en esa ocasión persiguió a Saeng.
¿Será que había desistido de la idea del castigo?, No, no todo estaba apunto de volverse más difícil.
Un día llego a manos de Saeng una nota en una paloma blanca, provenía del paraíso.

Al leerlo quedó impactado, no podía disimular su conmoción.

-¿Que ocurre Saeng?, ¿Que dice?. - pregunto Hyun que estaba junto a él.

-Dice que los superiores han decidido perdonarme si regreso ahora, pero de no hacerlo mi familia será exiliada ya que la unión de un ángel y un demonio es un pecado de deshonor familiar...- respondió  afectado.

- No lo entiendo, ¿por qué tanto interés en tí?, ¿Por qué no simplemente te dejan ir?

- Es porque soy candidato a asceder a un arcángel... no es algo que dictamine nuestra sangre si no el azar. Hace un tiempo fui llevado a un palacio en mi mundo donde se me prepararía para mí futuro. Algunos estaban al
Tanto que venía aquí porque me gustaba ver las cosas humanas y me lo permitían. Pero seguramente jamás creyeron que podría encontrar el amor en esta tierra y mucho menos que sería un Diablo...- explico Saeng

-Saeng....

- Debo admitir que era feliz con mi vida anterior, pero ahora que sé que existes no concibo otra forma de felicidad que no sea estar a tu lado Hyun...-Confeso mientras acariciaba el rostro de él.

-Yo me siento igual...

-No me importaría que me exiliaran, o que arrancasen, una por una las plumas de mis alas hasta quitármelas.....
Pero no puedo permitir que un inocente sufra por mi culpa, y mucho menos si son mis padres. Estoy seguro de que no sabe nada de todo esto.....

- ¿Cómo lo sabes?

- porque si están tratando de convencerme de regresar es porque quieren solucionarlo entre nosotros sin que nadie se enteré, sería un escándalo.

- Creo que puedo ver cuál será tú respuesta...

Saeng entristeció su mirada...
Perdóname Hyun.... Pero ese es mi límite...

Hyun lo rodeó con sus brazos, presionándolo  contra su pecho -No tienes que pedirme perdón, lo único que me puede hacerme daño es verte triste..... Solo quiero que sepas que lo siento por tí es para siempre...

- igual yo.... Si sólo fuéramos de la misma raza las cosas no serían tan difíciles.... - suspiro Saeng.

- Tal vez..... Pero tampoco nos hubiésemos amado así, nos queremos porque somos diferentes, porque encontramos en él otro cosas que no conocíamos en nuestros mundos... Dijo Hyun

Saeng decidió responder aquel mensaje diciendo que regresaría esa misma noche.
Eligieron pasar sus últimas horas juntos  en la intimidad de ese cuarto, amándose en aquella pequeña libertad. Antes de irse Hyun le pidió bailar una última vez, pero siendo ellos mismos, sin disfraces, mirándose tal cuáles eran, solo entre esas cuatro  paredes.
Finalmente el tan temido momento llegó, era la hora de despedirse. Fueron hasta el bosque en medio de la noche como Saeng prometió, se entregaría por voluntad propia.
Allí lo estaba esperando un ángel, un poderoso guardián para llevarlo de regreso. Iban tomados de la mano, aquella imagen impactó al guardián, comprobó que lo que le habían dicho era verdad,
Un ángel y un diablo juntos entre los humanos.
Una inmensa tristeza invadió el pecho de Saeng, no quería soltar la mano de su amado, él también se resistía a la idea de que se fuese, resignado, se colocó en frente a Hyun, aunque casi no podía ni mirarlo, y con un tímido beso le dijo adiós.

Comenzó a caminar en dirección a aquel guardián, pero a mitad de camino se detuvo, volvió corriendo sobre sus pasos y abrazo con todas sus fuerzas a Hyun.

-No puedo hacerlo... No quiero dejarte... -Decia entre sollozos

- por favor no llores Saeng... Sabes que  es lo único que puede herirme...

- pe... Pero de sólo pensar que no volveré a verte siento mucho dolor...

Saeng lloraba sin consuelo, Hyun se sentía culpable por aquella situación, pensaba que si no lo hubiese  buscado, si no lo hubiese ilusionado desde un primer momento, Saeng no tendría que pasar por todo eso. Fue entonces cuando decidió tomar una drástica decisión, había una sola cosa que podría hacer para ayudarlo... - mírame Saeng... -le dijo con una voz serena y lo besó apasionadamente, - si algún día mi recuerdo regresa a tu corazón estaré aquí...esperándote. -sonrió Hyun
- a que te refieres. intentó preguntar Saeng y de repente Hyun lo besó en la frente haciendo que cayera inconsciente en sus brazos.

El ángel y El Demonio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora