¿Dónde Estás?

3•~ ☆Último 0bjetivo: Sanha☆

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Jinjin veía aún asombrado su casa. Jamás creyó verla tan reluciente ¿Cómo pudieron en tan poco tiempo haberla dejado de esa manera? Vaya que se veía y olía increíble. 

Ya era de noche. Los amigos de Jimin se habían ido hace media hora dejando para otro día la cena prometida por Rocky ya que estaban cansados por el trabajo realizado. Con toda la vergüenza pocas veces vista, Jinjin les agradeció. Ello conllevó a que los chicos hablaran con más privacidad.

Luego del baño y de hasta limpiar el Anacondo de Jinjin, cosa que divirtió a más no poder al cenizo que reía por la locura de Rocky y la incredulidad de Jimin al respecto y que al final... nahhh mejor se quedan con la duda si Rocky se atrevió o no hacerlo... conversaron relajados primeramente en el jardín y luego en la casa. Nada fácil, no la tuvieron nada fácil.

Jinjin nunca ha sido de expresar sus emociones ni sentimientos, le cuesta confiar y más el haber crecido en un mundo de reglas estrictas, de protocolos asfixiantes y de hipocresía a la orden del día. Así renunció a su mundo. Simplemente cuando se enamoró de aquella humilde chica siendo tan joven, lo dejó todo. Pero el cruel mundo se la arrebató un día en un absurdo accidente provocando más su odio y desconfianza por todos y de todo.

Hasta que aquel día, en el trabajo que había conseguido a medio tiempo, en su descanso, mientras leía escondido y reía con una ridícula historieta, apareció aquel joven  quien lo miraba desde cierta distancia. Sus ojos se encontraron. Su sonrisa fue desapareciendo poco a poco y aquellos ojos brillaron de forma mágica, o eso pensó al no poder quitar la mirada de aquella persona quien dibujó la sonrisa más hermosa y sincera que había en su maldita vida. Sin más aquel extraño se acercó. Él obviamente lo trató de la peor manera y aún así ese chico ni siquiera se inmutaba. Solo reía e invadía su espacio cada vez que se lo encontraba en el trabajo y luego en la universidad.

Su mundo solitario y de desconfianza cambió. Cambió por él. Solo él logró hacerlo nuevamente sonreír a la vida.

Pero el muy desgraciado lo dejó. Le abandonó así sin más. Se supone que era su amigo. Se supone que no lo abandonaría. Se supone que morirían juntos y hasta los meterían en el mismo ataúd abrazados para ahorrar en gastos funerarios. Ridícula promesa que hicieron un día de nostalgia y tristeza al recordarla a ella en medio de una borrachera pero que él recordaba perfectamente aquella promesa mientras se abrazaban llorando en aquella habitación. 

Al parecer MJ no recordó esa promesa. Y lo odiaba por eso.

Jimin y Rocky lograron bajar sus defensas y resentimiento. Muchas de sus deducciones e hipótesis sobre la extraña ausencia de su amigo le hacía eco. Razón tienen en señalar que hay algo extraño. No puede negarse ni negarles a los chicos su realidad.

- También lo extrañas.

- No tienes idea de cuánto.

- Nosotros también Jinjin - aclaró el rubio - por eso te pedimos que dejemos nuestra tristeza y depresión al no tenerlo en nuestras vidas, porque si, yo también me encerré pensando y repasando una y otra vez qué lo llevó a irse de esa manera.