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Solo quiero informar que está Historia dependerá de dos Caminos que se elegira en el transcurso de la historia
Solo trato de confundir y ver hasta donde puedo llegar
Volver a sufrir nuevamente por el miserable sentimiento del amo...
Las heridas del asesino habían sido atendidas por las enfermeras, que lograron curarlo a tiempo.
Había perdido demasiada sangre tanta que en poco tiempo tanto él como su Valkiria habrían muerto.
Sin embargo, la resistencia de Jack fue asombrosa, permitiéndole sobrevivir. Ahora, solo necesitaba reposar y sanar sus heridas, ya estaba fuera de peligro.
Hlǫkk llevaba en una bandeja con un poco de té y unas galletas para él.
Su intención era simplemente dejar el té y las galletas para cuando él despertara.
No planeaba quedarse más tiempo del necesario. Con pasos medidos y firmes, abrió la puerta de la habitación, encontrándose a Jack sentado en la cama.
Él estaba claramente sorprendido al verla, pero ella fingió no notarlo. Con un leve gesto de sorpresa, retrocedió y cerró la puerta rápidamente.
—¿Eh? ¿Eres tú, jovencita? —exclamó Jack, todavía aturdido por la inesperada visita.
Jack no esperaba verla, especialmente después de que se había marchado para bañarse sin importar lo herido que estaba, aunque el Lo comprendía perfectamente dado a sus acciones pasadas sabía que no quería verlo después de haberla obligado a hacer el Völundr.
Hlǫkk, por su parte, se sentía nerviosa.
Sus pensamientos eran un torbellino de dudas no sabía bien que hacer, no sabía si entrar o no, pero tampoco podía estar enfrente de la puerta sin hacer nada.
Inspiró profundamente para calmarse, abrió la puerta nuevamente. Esta vez, entró decidida, acercándose a él con movimientos calculados y elegantes, llevando la bandeja.
Al llegar a su lado, colocó la charola sobre la mesita junto a la cama, vertió el té en una taza, el vapor ascendiendo lentamente en el aire.
—Mhmn... Ten, niño —dijo, extendiendo le la taza de té.
Jack tomó la taza con una mezcla de sorpresa y agradecimiento en sus ojos. Sus dedos rozaron con los de Hlǫkk por un instante, un contacto breve pero cargado de tensión.
La Joven Valkiria se avergonzó y aparto su mano del roze entre sus dedos, aparto la mirada Cruzando los Brazos.
—Gracias... —murmuró él, sin saber qué más decir.
La habitación se encontraba silenciosa, ninguno de los dos se atrevía a hablar o decir algo al respecto.
Era un momento tenso e incómodo. Hlǫkk, con los brazos cruzados, volteó a ver a Jack tapando se con esos lindos Ojos Cautivadores y brillantes quería estar un poco más a si pero Apartó la mirada de golpe, estaba por marcharse cuando se sobresaltó al escuchar la voz de su hermana Brunhilde y los pasos de Göll detrás de ella.
