Capitulo 05

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Recuperando partes de mi poco a poco.
                                     ——————
                                    Evangeline Jolie

Los brazos de Katana y Briar eran suficiente, era todo lo que quizá necesitaba. Aunque nada me parecía en total normalidad, todo se sentía tan complicado y distinto. Probablemente mis sentimientos de amistades cobraban vida, me sentía querida por conocidos.

Sollozo mientras los abrazo a ambos como puedo. Mi mejor amigo se aferraba a nosotras  como si no quisiera soltarnos más. Aunque de su parte no habían rastros de lágrimas, puedo pensar que está feliz o quizá tranquilo. Mi mejor amiga si que llora, derrama sus lágrimas como si nunca lo hubiese hecho antes. Pero puedo entenderla, ella... Ella pasó por lo mismo que yo, ¿cierto?

—Estamos juntos, los tres estamos juntos de vuelta —digo, agarrando las manos de ambos cuando se separan de mi. Katana asiente mientras se limpia las lágrimas, dejando que sus labios marquen una hermosa sonrisa.

Briar asiente y me acaricia la mano.

—Así es, Jolie —habla Briar.

Es lo que Asher me ha dicho. Le creo, confío en sus palabras y confío en las palabras de mi mejor amigo.

Quiero recordar, quiero recordar más... Por favor, un recuerdo más...

—Estamos bien, al final he hecho lo que me pediste. Mira —Katana dice y me señala a mi y luego a ella—, algunos golpes pero lo importante es que estamos bien.

Tenía razón, estamos bien. ¿Sabía de lo que hablaba? No, no sabía nada, no tenía ni idea de porque ella llevaba partes de la cara con hematomas. O porque sus brazos tenían líneas de sangre.

No podía admitir que mi memoria se había esfumado, así que asentí y trague pesado.

—Es cierto, hiciste lo que te pedí... —le sonreí y limpie mis lágrimas. En el fondo seguían los otros dos parados. A mi espalda Asher es quien acaricia mis hombros con un toque me relajaba por completo. Es cierto, me ayuda tenerlo cerca ya que es quien me ayuda. Quien no me deja ni me dejara sola, por eso estoy más tranquila con todo esto.

Me volteo para mirar a Asher, necesitaba librarme de esta conversación, no puedo seguir rompiéndome la cabeza intentando recordar lo que ahora mismo no puedo. Hice un gesto con mi cara que al instante entendió porque levantó las cejas y carraspeó.

—Vayamos a desayunar, ya después tienen tiempo para hablar —Asher manda, mientras pone sus manos en los mangos de la silla y comienza a llevarme.

Su hermana vuelve a sonreirme, la verdad es muy hermosa. Asher y ella tienen mucho parecido, cualquiera pensaría que son gemelos, pero se que no. Se da la vuelta para sentarse en una de las sillas del comedor, Adan hace lo mismo.

Ya mis lágrimas no se deslizaban, me sentía más tranquila. Con la ayuda del hombre que siempre está a mi lado, me siento en una de las sillas del comedor y él hace lo mismo. Los demás hablan, así que por ahora no hay un silencio incómodo.

—¿Dónde está la pequeña? —le pregunté a Asher.

—Durmiendo, la noche anterior no ha descansado tan bien —dijo y soltó un suspiro. Levante las cejas y me acomode mejor.

—¿Y eso? —dije, y Asher se encogió de hombros.

—No lo se, no ha tenido una noche buena. —Su sonrisa fue leve.

Nos quedamos charlando por unos minutos más, los demás se habían incorporado a nuestra conversación de Aella y su amor por las princesas y juguetes. Había estado sonriendo todo el rato, ya estaba loca de verla.

Un refugio en llamas #1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora