Capítulo 6

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Tal como le había pedido Fyodor a los pocos días de su reunión Sigma logró iniciar practicas en la agencia, a ojos de esta Sigma no era mas que un simple estudiante universitario buscando un lugar en el cual iniciar experiencia laborar.

Tomó aire antes de formar una sonrisa inocente en sus labios e ingresar a la sala principal de la agencia, no tenía un trabajo demasiado difícil solo debía ayudar a llenar algunos documentos pues ahora que Dazai era un niño no podía hacer su papeleo y los demas estabas demasiado ocupados ayudando a Ranpo a buscar al culpable del estado de su compañero. Aquello claro que le era favorable, sin él detective cerca podría mantenerse infiltrado el suficiente tiempo como para cumplir su misión.

—¿Amaneciste bien Sigma?

—Si, la universidad no a dejado demasiados trabajos así que no es difícil ir y luego venir al trabajo.

Mintió con tanta facilidad que hasta él se impresionó, quizás se estaba tomando todo en serio por el hecho de que su libertad estaba en juego.

Tras responder se sento en el que era el escritorio de Dazai y comenzó a trabajar; no pasó mucho hasta que llegó Atsushi junto a Kyoka y Shiji, el menor estaba quedándose con ambos jóvenes mientras Ranpo investigaba, claro que para el pequeño ello era algo incómodo, nunca había convivido con una fémina antes, ni siquiera había entablado conversación con ninguno de ellos antes de la fiesta por el mero hecho de no saber como actuar con ellos sin sonar cruel.

El pequeño suspiro antes de soltar la mano de Atsushi y correr a sentarse en el sofá cercano, no disfrutaba demasiado del contacto con el menor, le era familiar y sin duda le agradaba pero sentía que en su estado actual no podría hacer mas que herirlo física o mentalmente.

—Oh, Dazai, ¿verdad?

Le pregunto Sigma el nuevo empleado de la agencia, le era raro y sin duda sospecho, no solo el hecho de que había llegado justo luego de que Ranpo se fuera, sino que era mas el hecho de que siempre trataba de entablar una conversación con él.

Por está vez decidió no ignorarlo como había hecho días anteriores, no era que le importara que el mayor se ofendiera, era mas el hecho de que de seguir haciendo eso se vería como un niño malcriado, ese tipo de niños que al cual nadie quiere cerca.

—Buenos días Sigma.

Respondió monótonamente dándole la oportunidad al bicolor de entablar una conversación pero hubo aldo que no pudo evitar notar, aquella sonrisa casi imperceptible en Sigma.

—¿No deberías estar en clases a esta hora?

Preguntó el mayor a lo que muchos en la agencia quedaron en silencio, para Dazai aquella pregunta era de esperarse puesto que nada había informado a Sigma sobre su condición, al contrario para todos fuera de la agencia el niño era sobrino de uno de los trabajadores de la agencia.

—Dazai no asiste a clases esta semana.

Informó Kunikida mintiendo de manera tan convincente que Sigma no se atrevió a cuestionar por miedo a ser descubierto.

Dazai sólo sonrio antes de volver a hablar, sin duda esto sería curioso.

—¿Por qué preguntas Sigma? Es acaso un problema que te afecte, lo dudo, tú solo estás aquí por trabajo, ¿verdad?

Preguntó con frialdad, Kunikida miró de reojo al menor, aveces olvidaba que aquel niño era Dazai, su molesto e insoportable compañero de trabajo, pero sobre todo alguien bueno para manipular y hacer que todo este a su favor.

—Dazai, eso sono irrespetuoso.

Dijo Tanizaki un poco preocupado por la situación, antes no había hablado demasiado con Dazai pero sabía que podía ser un peligro para la seguridad pública, si no es por decir nacional, después de todo para nadie era secreto que Dazai tenía muchos enemigos a los cuales podía controlar con información que tenía sobre ellos, no sería una sorpresa para nadie que mandaran a alguien para acabar con él en su estado actual.

Por ello mismo fue que hicieron una investigación sobre Sigma y para suerte de todos tenía un buen perfil, no tenía ningún historial delictivo y pertenecía a una buena universidad por lo que no representaba una amenaza para Dazai.

Lamentablemente para el pequeño no era suficiente puesto que a sus propias no confiaria nunca en una persona con la cual Ranpo se allá relacionado antes dado que en su estado actual no sabia quienes eran sus enemigos o donde tenía oculta información.

—¡No seas cruel con él, hermano, es solo un niño!

Regaño Naomi mientras corría a envolver a Shuji con sus brazos, el menor no se quejo y permitio a la adolescente abrazarlo como agradecimiento por salir a su favor. Aunque apesar de ello Dazai no despego su mirada de Sigma en ningún momento, no podía confiar en que no se trataba de un enemigo y si fuera así ni lo recordaría.

❂✿❂

Sabía que lo había arruinado, todos los presentes ese día se lo dijeron pero, ¿que podía hacer en un momento así? Había pasado la mayor parte de su vida protegiendo a aquel suicida solo para que al final para él no fuera nada. Si, sabe que no recuerda nada pero es imposible asimilar aquello para Chuuya quien había vivido una vida dedicada a proteger a Dazai y no sólo por órdenes de su jefe quien siempre le ordeno proteger a su sucesor, no, era mucho mas, en el fondo Dazai siempre fue mas que el simple sucesor de port mafia.

Se inclino como despedida del despacho de su jefe a quien le había jurado lealtad, pero había algo que ambos sabían y no podían negarlo desde que Chuuya dejó de arrodillarse ante él a simplemente inclinarse ligeramente. Mori lo sabía, podía tener la lealtad de Chuuya, pero si Dazai se lo pidiera, Chuuya no dudaría en matarlo.

Aquella era la diferencia, Chuuya creció junto a Dazai, convivieron, compartieron momentos felices y tristes, se sonrieron con cariño en su momento apesar de ser la perdición del otro. Mori le permitió salir a Chuuya tras ordenarle vijilar a Dazai, él podía ser un niño, pero eso no lo hacía menos peligroso.

𝚎𝚕 𝚍𝚎𝚜𝚊𝚜𝚝𝚛𝚘𝚣𝚘 𝚖𝚒𝚗𝚒-𝙳𝚊𝚣𝚊𝚒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora