La castaña miro la carretera por la ventana del auto, había pasado una hora desde que su padre empaco una mochila para ella diciéndole y explicándole que era un peligro para ella seguir viviendo con él.
-¿A donde vamos, papá?- pregunto la niña de 10 años.
-Es un lugar muy lejos donde podrás estar a salvo- contesto el hombre centrando su vista en la carretera.
Pero la niña estaba demasiado pequeña como para notar el nerviosismo de su padre al hablar, o que su pie pisaba fuertemente el acelerador como si quisiera ir aún más rápido de lo que le permitía el auto.
Cuando por fin llegaron cerca de unas colinas con muchos árboles su padre estacionó cerca y rápidamente salió para despues rodear el coche para abrir la puerta del lado de la niña.
-¿Que es este lugar, papá?- pregunto ahora con temor y confusión mientras el hombre quitaba su cinturón de seguridad y la ayudaba a bajar.
-Daphne- se agacho a una altura visible para su hija que lo ojservaba- hay algunas cosas que no entenderás por tu edad, pero en este mundo, en cualquier lugar hay peligros para ti.
-¿Que es este lugar?- cuestiono dr nuevo con su voz suave.
-Es el campamento mestizo, aquí podrás estar a salvo, cariño- explicó con paciencia intentando no llorar.
-¿Me vas a dejar aquí?- pregunto con su voz rota.
Su padre tuvo que cerrar los ojos para que su corazón no se quebrara en mil pedazos al ver a si pequeña llorar.
-Es por tu bien y te aseguro que quisiera que hubiera otra forma, pero...
-No me dejes, papá- soltó unas lágrimas aun sin entender porque su padre quería dejarla ahi- porfavor...
-Hija...algun dia podremos volvernos a ver, cuando sea seguro para ti- la niña negó llorando- te lo prometo, Daphne.
-No, no, no- negó- ¡quédate!
-Hija...
-Prometiste que estarías para mi- reprocho entre lagrimas- eres lo único que me queda...
-Y tu eres lo único que me queda a mi- la abrazo fuertemente- y tengo que asegurarme de que no te pase nada.
-Te prometo que Regresaré algun día- Beso su frente antes de separarse del abrazo- Te amo.
-Te amo- dijo la niña con lagrimas en los ojos.
Los recuerdos de lo que paso después, eran borrosos para la joven de ahora trece años, estaba por cumplir catorce años y aún no sabía que paso con las promesas de su padre. Algunas veces sus sueños la traicionaban mostrandole ese terrible día para ella.
Esa era una de esas veces.
La chica salto en su cama gritando fuertemente, por sus ojos bajaban lágrimas recientes, su corazón palpitaba fuertemente y su frente estaba cubierta de sudor.
-¡Daphne!- escucho un grito a su lado y reacciono volteando si rostro.
-Estoy bien- consiguió decir calmando su respiración- solo fue...
-Una pesadilla- la interrumpio Luke- como las últimas veces.
La chica bajo su cabeza mientras el chico tomaba asiento frente a ella.
-No estas durmiendo bien- dijo el chico pasando un mechón del cabello de Daphne para atras.
-Es solo que...sigo soñando con el, Luke- el chico la escucho atentamente- aún en mis sueños el me persigue.
-Es tu padre después de todo- la chica soltó un suspiro y el castaño tomó sus manos- aún después de tantos años sigo soñando con mi madre.
-Tu amas a tu madre- recordó.
