la verdad entre las sombras

capítulo 2 (primera parte)

Sábado, [06:37 am]

Era recién por la mañana. Los chicos estaban despiertos, cada uno con su taza de café o té. El aire fresco de la montaña se filtraba por las ventanas entreabiertas, mezclándose con el aroma del desayuno. Estaban todos hablando mientras Amelia escribía en su libreta las cosas que debían investigar y revisar.

—Entonces también deberíamos revisar las noticias, revistas y sus redes sociales —dijo Emma, tomando un sorbo de su té.

—También tenemos que revisar las fechas y los lugares —mencionó Michael, mordiendo un par de galletas para acompañar su café.

—Miren, hoy podemos hacer todo lo que es virtual y escribir, pero ya mañana salimos a investigar —propuso Evelyn, y todos aceptaron la idea al ser la mejor opción.

—Entonces, Ames, ¿tienes tus cámaras de fotos y para grabar? —preguntó Christopher.

—Sí, siempre las llevo, así que mañana salimos con eso, pero llevamos algunas cosas más —Amelia empezó a escribir en su libreta antes de levantarse y anotar lo mismo en una pizarra que estaba frente a ellos.

—Michael, busca en sus redes sociales, noticias y revistas —dijo Amelia, y Michael asintió con la cabeza, terminando su café antes de tomar su celular.

Amelia continuó escribiendo en la pizarra con una fibra roja. —Emma, te toca la locación con Evelyn —ambas asintieron y continuaron tomando su desayuno.

—Y Christopher, te toca ayudar a los demás y con el mapa —con esto último dicho, cada uno comenzó a hacer sus respectivas "tareas". A Amelia le tocaban las cámaras para grabar y fotos, así que ella se encargaría de ello y otras cosas más.

—Iré a grabar un poco y así —dijo Amelia, y los demás murmuraron un "sí" mientras continuaban con sus tareas.

Amelia tomó sus cámaras y salió afuera de la cabaña, disfrutando del aire fresco y del sonido de los pájaros. Comenzó a sacar fotos de cualquier cosa interesante y a grabar ciertos paisajes hasta que algo negro entre los árboles llamó su atención.

Trató de seguirlo, pero aquella misteriosa cosa desapareció de la nada. Extrañada, Amelia solo se dio media vuelta y continuó con su tarea, pero mientras el tiempo pasaba, más vigilada se sentía.

—¿Qué mierda...? —murmuró, sintiendo un escalofrío en la nuca. De repente, sintió como si alguien la empujara y cayó al suelo. Se levantó como pudo y, sin perder tiempo, tomó sus cámaras y regresó a la cabaña, su corazón latiendo aceleradamente.

—¿Cómo van? —preguntó al entrar, dejando sus cámaras en un sofá y sacudiendo la ropa llena de tierra.

—Bien —contestó Evelyn, concentrada en su trabajo. —¿Y a ti qué te pasó? —preguntó Christopher, bastante preocupado por su hermana. Se levantó rápidamente y se acercó para revisarla.

—Tranquilo, estoy bien —le respondió entre risas, pero al tocar su abdomen, sintió un dolor agudo. Un quejido se le escapó y su camisa estaba algo roja en esa zona.

—¿Qué mierda te pasó...? —su hermano levantó su camisa con cuidado, dejando ver una herida en su abdomen que sangraba bastante.

Los demás se dieron vuelta al escucharlos, pero no esperaban ver aquella escena. Todos se levantaron para ayudar, y Christopher pidió vendas y algo para desinfectar la herida.

—Mierda... mierda... —la desesperación de Christopher era evidente, pero mantuvo la calma para no herir más a su hermana.

Después de un buen rato, envolvió su abdomen con unas vendas, cuidando cada movimiento.

—No sé cómo pasó... —Amelia estaba aún en shock, pero su hermano la interrumpió, tomándola con cuidado para dejarla en el sofá.

—Tú mejor descansa. Deberíamos llevarte al hospital —dijo Michael, tomando su celular a punto de llamar, pero Amelia lo interrumpió.

—No, no llamen a nadie. Estoy bien, solo fue un susto —dijo, tratando de sonar firme aunque el dolor aún le punzaba.

—Ames, esto no es un simple susto. Estás herida —insistió Christopher, preocupado.

—De verdad, estoy bien. Solo necesito descansar un poco. No podemos detenernos ahora —Amelia intentó levantarse, pero Christopher la detuvo suavemente.

—Descansa un poco, Ames. Nosotros nos encargamos de todo por ahora —dijo Evelyn, dándole una mirada tranquilizadora.

—Sí, déjanos a nosotros. Te cubrimos —añadió Emma, asintiendo.

Amelia, aunque reacia, se recostó en el sofá, aceptando que necesitaba un momento para recuperarse. Mientras tanto, sus amigos continuaron con las tareas, decididos a descubrir qué estaba pasando y protegerse mutuamente de cualquier peligro que les acechara en ese misterioso bosque.

Amelia se quedó completamente dormida. Pasaron varias horas hasta que despertó por una voz familiar. Cuando abrió los ojos, se encontró cubierta con una manta y con su peluche a su lado. Pero los chicos no estaban.

Se levantó lentamente, quejándose por la herida, y miró la hora: eran las 20:38 pm. Habían pasado unas 10 horas desde que se quedó dormida, lo cual la sorprendió bastante.

—¿Chicos...? —los llamó en un tono bajo mientras caminaba a paso lento por la herida. Al no ver a nadie en la cabaña, decidió salir, la peor opción.

Al no encontrarlos afuera, comenzó a caminar por el profundo bosque. Mientras avanzaba, a lo lejos logró ver algo más, aquella figura que vio antes de que la empujaran.

Trató de seguirla, pero de repente sintió un fuerte golpe en la cabeza que la hizo desmayarse. Cuando despertó, vio a sus amigos a su alrededor, abrazándola al verla despierta.

—¿Qué pasó...? —preguntó Amelia, sin entender nada y con el cuerpo temblando.

—Te encontramos tirada en el bosque —le contestó Emma, sentándose en una silla. —Como no te vimos aquí dormida, salimos a buscarte y te encontramos allí —Michael le explicó, disipando las dudas de Amelia, aunque aún no entendía qué había pasado exactamente.

—Tenemos que tener más cuidado. Algo o alguien no quiere que estemos aquí —dijo Christopher, mirando con preocupación a su hermana y a los demás.

—Mañana, salimos todos juntos y no nos separamos —propuso Evelyn, firme.

—Sí, y tomamos más precauciones —añadió Emma, mientras todos asentían.

Amelia, aún recuperándose del susto, sabía que tenían que estar más unidos que nunca para enfrentar lo que sea que acechaba en ese misterioso bosque.

Continuara...?