Adam "La Traición Del Cielo"

Capitulo 5: Conflictos...

Estaba de vuelta, estaba de vuelta en el lugar que menos deseaba estar, el cielo.
Estaba al frente de las últimas personas que lo traicionaron, la mocosa que inició todo ese problema y la mujer que lo terminó.

Lo miraban con ojos llenos de dolor, llenos angustia, pero sobretodo llenos de tristeza, tristeza de lo que habían echó y provocado, no solo hacía su persona, si no a toda la vida de su descendencia.

Por favor Adam, solo quédate... -

Estaba cansado, había pasado tres meses sin dormir por estar cazando, no había descansado ni un solo segundo, ni siquiera había comido, su mente estaba inestable, ver a esas mujeres su ira aparecía, pero ya estaba arto, el vaso ya se había desbordado hace mucho tiempo, solo necesitaba caer.

Atacó, con toda su furia, la furia que contuvo desde su primera traición.

¡Dime Sera!, ¡Dime quién no hizo nada para ayudarme con Lilith!, ¡Dime quién no me ayudó con Eva!, ¡Dime quién no me mandó una señal para aprender a mejorar!, ¡Dime quién no hizo nada cuando Lucifer me arrebato a Lilith y Eva de mí lado! -

Sera solo trataba débilmente de defenderse, pero no lo hacía bien, sabía que se lo merecía, merecía cada golpe, cada reproché del hombre al frente suyo. Aunque pareciera fuerte e completamente fría por fuera, dentro suyo solo era alguien rota.

Emily trató de ayudar a su hermana sujetando en brazo de Adam, pero este solo necesitó de una patada para mandarla contra la pared, agrietando la por el impactó.
Sera trató de ayudar a Emily pero Adam siguió hablando, provocando en las dos un sentimiento muy doloroso en sus corazones.

¡Dime quiénes Sera!, ¡Dime quiénes me abandonaron solo por una mentira!, ¡¡¡Dime!!! - Exigió fuertemente, terminando con una patada lateral en el costado de la serafín mayor provocándole que terminara en el suelo con un fuerte dolor.

Pero no más que el dolor que sentía en su corazón y mente.

Dime quién no me ayudó cuando lo perdí todo más de una vez... - Dijo ya exhausto por todo lo que le había pasado en toda su vida. Cayó de rodillas ya no podía mantenerse de pie si no fuera por su propio poder.

... -

Sera no dijo nada solo se acercó adolorida a Adam, para posteriormente abrazarlo por la espalda liberando unas cuantas lágrimas de su ojos, le había provocado tanto sufrimiento a la creación de su padre y ahora que se daba cuenta, quería remediarlo, haría cualquier cosa por el, hasta ir al infierno y terminar con todo esto, aunque su propia vida fuera arrebatada.

Adam no hizo nada, tal vez por el cansancio o porque realmente necesitaba un abrazo, un abrazo sincero después de tantos milenios. También sintió como las manos de Emily estaban en su máscara, eran suaves, tan cálidas.

Sintió como le quitaba su máscara y sombrero, no le importo, no es como si fuera la gran cosa para el.
Aunque eso no era la misma situación con Emily y Sera, preocupadas veían el cabello y los ojos de Adam.

Adam, un hombre fácilmente guapo, cuando fue creado su cabello era tan brillante y vivo, mientras sus ojos eran tan azules y brillantes, rebosantes de vida y inocencia.
Cuando fue a la tierra su cabello y ojos de apagaron un poco, representando la pérdida de una parte importante de el.

Así siguió por el cielo hasta su destierro. Ahora su cabello antes castaño ahora era más apagado, una combinación entre el castaño oscuro y las canas que debió tener en vida. Mientras que sus ojos antes dorados por su divinidad, ahora eran grises, casi como si no tuvieran vida.

Emily solo lo abrazo con fuerza.

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Estaba de vuelta en el infierno, estar con ellas dos disminuyó su enojo y odio, pero no las perdonaría.
El solo seguiría con su plan.