En londres sonaba una cafeteria a la que la gente llamaba el cafe encantado, la primera vez que abrio esta cafeteria fue en un dia lluvioso, ese mismo dia dos personas mayores pasaron cerca y entraron para refugiarse de la lluvia un chico con el cabello largo por encima de sus hombros y ojos color miel fue quien los atendio.
estas dos personas pidieron algo fuerte para entrar en calor, ambos hombres se vein cansados y algo mojados por la lluvia, el joven de cabello cafes y ojos como la miel les ofrecio sentarse cerca de la ventana de cristal en una mesa compartida de madera.
en poco tiempo el joven regreso con dos tazas de cafe, dos café blulé.
Ambos hombres bebieon sus respectivas bebidas, la lluvia ya habia cesado y estos se disponian irse no sin antes decirle a aquel chico:
- gracias por recibirnos y darnos este delicioso café -
- No hay probela despues de todo es mi trabajo - fue su respuesta
ambos hombres salieron, pero estos se llevaron una gran pero grata sorpresa.
Ambos hombres eran empresarios que habían ya dedicado parte de su vida a la vida de oficinista sentados frente a un computador, trae cansancio, a ellos ya les habia llegado su factura por ese trabajo y ese dia bajo la lluvia entraron a ese café para refugiarse.
ambos hombres despues de despertar setian que ese dolor tan insoportable que afectaba a sus espaldas era casi nulo como si el dolor fuera como una ligera pluma ya no sentían ese gran dolor, ambos repasaron que hicieron para que ambos tuvieran sus espaldas ligeras como una pluma, es eso recordaron el cafe que les ofrecio aquel chico oji miel.
tanta fue su sorpresa y emocion que ese dia decidieron ir con otros compañeros a ese mismo cafe, de nuevo ese dia estaba lloviendo y el cafe de nuevo estaba abierto.
gracias a estos dos primeros clientes, la lluvia y su visita con sus compañeros el cafe se hizo mas sonado por lo que podia hacer con solo beberla.
para muchos les fue dificil poder probar de estos cafes ya que con suerte podian ver la cafeteria abierta, los que tenian la oportunidad simpre preguntaban lo mismo:
- como haces que tu cafe este asi de encantado-
- solo es mi trabajo servirles su respectivo cafe - era la respuesta a esas preguntas.
Un año ha pasado y por aquellos que han disfrutado esta experiencia lo han llamado el café encantado.
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𝑒𝑣𝑒𝑟𝑦𝑏𝑜𝑑𝑦 𝑙𝑜𝑣𝑒s 𝑠𝑜𝑚𝑒𝑏𝑜𝑑𝑦
Romansaen la gran londres en una cafetería que era ya muy conocida por su preparacion de encanto y no era para una exajeracion las pocas personas que han podido probar la han describido como una cafeteria encantada, por el simple echo de que con una taza p...
