Mi dulce magnolia (Severus snape x tn)

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Era snape quien después de aventarla a la pared con casi todas sus fuerzas la presionó con su cuerpo con fuerza.

T/n: que hace? Dolió

Severus: porque no a asistido a clases?

T/n:le pedi al director ya no asistir y en lugar de entrar a clase con usted tomo clases extras con el profesor Grindelwald en dcao para recuperar mis notas

Esas palabras hicieron enojar más a snape y presionó más a t/n comenzando a besar y morder  su cuello con agresividad jalando la del pelo hacia atrás con brusquedad, t/n solo pudo jadear un poco más por el dolor.

Snape no parecía querer parar  o al menos asta que se oyeron pasos dirijiendose a ellos y snape tuvo que separarse por completo de t/n quien todavía estaba en shock si saber que acababa de pasar.

Gellert: señorita Miller que bueno que la encuentro, el director quiere verla en su despacho

T/n asintió con la cabeza y camino con el profesor gellert asta llegar a la oficina del director claro después de decir la contraseña.

Entraron y el profesor gellert se dirijo justo al lado del director y t/n tomo aciento frente a ellos.

T/n:me llamaba director?

Albus: si señorita, necesito su ayuda

T/n: en que puedo ayudarle director

Albus: necesito que le dé un recorrido a una nueva alumna de intercambio que se integrará en una semana, para que conozca un poco más la escuela

T/n: okey profesor, no se preocupe yo ayudaré a la nueva compañera

Albus: bien ya puede retirarse, ya casi es hora de la cena

Me despedí con un acentimiento  y salí directo al gran comedor, al entrar me encontré con lían y emeli.

Emeli:t/n dónde estabas?

T/n: el director me mandó a llamar

Lían: para que?

T/n: necesita que le dé un recorrido a una nueva alumna que llegara pronto.

Lían: una nueva alumna?

T/n:si

T/n sintio una fuerte mirada puesta en ella y volteo, claro tenía que ser snape quien la miraba fijamente, después de todo aún le encantaban los ojos oscuros de snape los cuales la hipnotizaban por completo.

Y ahí estaban ambos mantenimiento contacto visual sin que ninguno despegará la vista y para ser honestos ninguno quería apartar la mirada.

Albus quien no hace mucho avía llegado observaba la escena de su muchacho con una gran sonrisa en su rostro.

Albus sabía cuáles eran los sentimientos de snape mejor que el propio snape, por lo que se propuso a ayudar y tenía justo el plan perfecto.