ESTRELLA POLAR (TERMINADA)

Capítulo Diecinueve

POV SAKURA

Después de haber hecho el amor de forma tan tierna, decidimos terminar de empaquetar las cosas y regresar a casa. Por el camino en autobús seguimos comiéndonos a besos frente a las miradas de los pasajeros que nos acompañan, pero nos da igual, estamos en nuestra burbuja y nada ni nadie va a volver a romperla.

Llegamos y papá ayuda a Sasuke con las cajas, mientras que yo y mamá nos quedamos en la cocina para preparar juntas la cena.
Aprovechando que estamos solas, mamá saca un tema que se había pospuesto debido a lo sucedido con el padre de Sasuke.

—Esto... Sakura, sé que tal vez no es el momento, pero quería hablar contigo respecto a un tema un poco personal —al instante noto mis mejillas arder.

—¿Q... qué tema, mamá?, si quieres saber si Sasuke y yo estamos saliendo, pues... sí, así es.

—Eso yo lo imaginaba, cariño, pero no es exactamente a lo que me refería —sigue insistiendo.

—¿Ah, no? ¿entonces...? —sigo haciéndome la tonta.

—Voy a ir al grano, Sakura. Tanto papá como yo sabemos que habéis dado un paso más allá, ya me entiendes... —mamá es casi tan mala como yo para hablar de estos temas. Me quedo callada porque no sé ni dónde esconderme.

—Lo siento, mamá, pasó y... bueno, sé que fue una falta de respeto hacerlo en vuestra casa, pero...

—Ya no es solo eso, cariño, Sasuke es un amor y parece que contigo ha encontrado a su media naranja, pero yo lo que quiero saber es si tomastéis precauciones —un pinchazo me atraviesa el pecho.

Un carrusel repentino aparece en mi cabeza mientras da vueltas y vueltas intentando hacer memoria.
La primera vez creo que si se puso un preservativo, pero ese día en su habitación, no, y hoy por descontado tampoco.

—Mierda...

–¿Qué pasa, hija?¿he dicho algo que te haya molestado? —mamá pregunta mientras me agarra por los hombros.

—N... no, tranquila. No te preocupes, tomamos precauciones —odio tener que mentirle.

Pero mi madre no se chupa el dedo y sé que la cara con la que me está mirando es de desconfianza total y absoluta, pero por suerte, papá y Sasuke aparecen en el momento oportuno y termina la conversación.

*

Después de una cena envuelta entre silencio y algo de incomodidad, es hora de irse a la cama, pero antes de cerrar la puerta de mi habitación, Sasuke se cuela en ella y me mira preocupado.

—¿Qué te pasa, Sakura?, estás muy callada.

—No es nada, estoy bien... —miento porque no quiero que se preocupe.

—¿Segura...?.

–Segura, será mejor que te vayas a tu habitación antes de que mis padres sospechen lo que no es —le digo con una fugaz sonrisa.

—Está bien, pero que sepas que no me convences —dice antes de besarme dulcemente.

Una vez nos despedimos, me entierro en las sábanas y me hago un ovillo, sería mucha casualidad haber quedado embarazada a la primera de cambio, pero no puedo descartar esa posibilidad. Con ese pensamiento poco a poco voy quedándome dormida.

*

Al día siguiente

Ya he llegado a la universidad, estoy sola porque a Sasuke le han dado unos días libres tras la trágica muerte de su padre, así que aprovecharé para hablar íntimamente con mis amigas, seguro que ellas podrán echarme una mano.
Ya en el descanso, los chicos se van por un lado y nosotras por otro, así que en una mesa retirada del bar que hay en el campus, Hinata, Ino, Temari y yo tomamos asiento.