𝚃𝚎 𝚍𝚎𝚜𝚎𝚘 𝚌𝚘𝚗𝚖𝚒𝚐𝚘

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Su comida era deliciosa. Me había quedado encantado desde que salí de su apartamento, porqué el sabor se me hacía reconocido a las comidas que me preparaba mi abuela antes de fallecer.

Lamentablemente, al llegar a mi apartamento, afuera de la puerta estaba Sana, esperándome con Taehyung agarrados de la mano.

- Vaya que sorpresa tenerlos juntos en mi apartamento -Les digo mientras abro la puerta, ellos sonríen y se expresan felices.

- Sí, es muy lindo estar aquí nuevamente -Dice Sana sonriendo. Y no pude evitar responder.

- Mantienes aquí metida, Minatozaki.

Sana hace una mueca y Taehyung se levanta para observar las imágenes que tengo en cuadros pegados a las paredes de la sala de estar.

- ¿Cuando pegaste ésta imágen, Jeon? -Me pregunta en voz alta Tae, logro identificar la imágen desde lejos y respondo con risitas.

- Hace unas semanas, me parece muy linda -Respondi, él asiente y se vuelve a sentar al lado de Sana.- Bueno, ¿A qué se debe su visita?

- ¿Nos estás echando, Jungkook? -Pregunta Taehyung enarcando la ceja con ofensa, y niego serio mientras les entrego el trago en sus respectivas copas.

- Estaba a punto de ir a la empresa, ¿No les parece mejor que inicien? -Propongo.

- Esté fin de semana mi hermana cumple años, no te parece increíble -Dice él y asiento.

- Ajá, ¿Y?

Respondí, algo seco y desinteresado pero es que sinceramente me importaba ver a la linda nuevamente. Habíamos quedado en vernos en mi empresa, porqué Jaehyun tiene una reunión conmigo allí.

- Estamos invitados a una finca en Japón, Tokio, dónde nos vamos a quedar dos días de ésta semana -Me propone y lo dudo.

- Se puede llevar un acompañante -Dice Sana y miro a Taehyung buscando una aprobación. Él asiente.

- Gracias por invitarme, dile a Jisoo que se lo agradezco, pero sinceramente, voy a mirar mi agenda y veo si puedo o no, Kim -Le digo, él hace una gran mueca.

- Ojalá puedas imbécil, porqué hay muchos culos por probar -Me dice, Sana lo golpea en el hombro y este se queja.

- ¿No te basta con esa tal... Jinnie? -Pregunta algo confundida, frunzo el ceño y Taehyung rueda los ojos.

- Jennie. -Corrige- Y sí, tienes razón, ella es suficiente -Responde, Sana agacha la cabeza, se nota triste.

- Bueno, largo de mi casa.

Los echó y Sana es la primera que sale, después Taehyung antes de hacerme una cara de expresión morbosa. Sé que significa, pero yo ya tengo lo mío. Porqué es mío, acabo de nombrarlo mío.

•

- ¿Quieres un poquito de agua, Nancy? -Pregunto con angustia, ella se encontraba demasiado enferma.

- No...

Su llanto se hace presente y no puedo evitar sentirme mal por ella. Había perdido su bebé ayer en la noche, y me sentía mal porqué había llamado a mi teléfono por mi ayuda y yo me encontraba con Jungkook en la cama.

Es más, está mañana cuando nos vimos me ofreció ir a una finca como acompañante de una celebración que tenía, y no sabía cómo explicarle que ropa no tengo para ir. Pero era más importante prestarle atención a Nancy, que a mis dilemas.

- Quieres llorar, toma mi hombro como almohada -Le digo sintiendo pesar por ella, ella asiente y yo suspiro mientras acaricio su cabello.

- No sabía que hacer, Lisa -Llora con descontrol- No quería perder a mi bebé...

Y su llanto se vuelve más fuerte y duro de parar, ella se aferra al hombro de Lisa. Ya está más de tarde, pero aún no se acaba su turno. Estaban en la habitación de reposo, dónde habian camarotes para los trabajadores que terminan su turno y se van a almorzar.

- ¿Y quién fue él descarado que te hizo eso, Nancy? -Pregunte con rabia.

Cómo es posible que los hombres sean tan hijos de putas para abandonar a una mujer que tiene un bebé de su propia sangre. Eso sí me daba demasiada rabia. Y más sabiendo que ellos mismos saben la responsabilidad que corren si no lo hacen con preservativo.

Ayer había obligado a Jungkook a utilizar un condón, porqué embarazada no me deja y menos sabiendo que es un mujeriego.

Pero cuando Nancy soltó aquel nombre no supe que decir y mis latidos se detuvieron unos segundos, antes de toser como loca por falta de aire y respiración. Estaba en shock.

- Jeon Jungkook, el hermano del señor Jaehyun.

No supe que decirle y me sentí traicionada, como también traicionando a alguien. Ella era una de esas mujeres que había compartido con él, y no le brinde ayuda ayer por estar cogiendo con el mismo padre del bebé que acaba de perder. Me sentí como un monstruo.

Me aleje de Nancy, esa fue mi reacción. Y ella se quedó confundida mirándome. No sabía si decirlo pero igual termine murmurando la palabra menor indicada.

- Perra...

- ¿Que te pasa, Lisa?, ¿Te sientes bien? -Me pregunta ella levantándose del asiento y acercándose con preocupación, pero yo me alejo.

- ¿Por qué te metiste con Jeon Jungkook? -Le pregunté algo alterada, ella se sorprende por eso y yo me prendo en rabia.- Sabes que es un perro, ¿Por qué.... Y cuándo paso todo eso?

- ¿Por qué te importa tanto, Lisa? -Me pregunta en murmuro, y yo me siento traicionada pero a la vez sabía lo que me corría. Así que lo esperaba.

- Jungkook es mío, Nancy.

Y ella cambia la expresión de su rostro. Y con la mirada nos decimos de todo, toda la verdad. Ella parece estar molesta y yo el triple.

- Maldita zorra, te estabas revolcando con él anoche cuando te llamé, ¿Verdad? -Me pregunta con rabia mientras intenta pegarme con lágrimas bajando por sus ojos.

Me alejo de ella, pero ella no se detiene.

- ¡Zorra!, ¡Es el papá de mi bebé!

- ¡Lo perdiste, Nancy!, tienes que aceptarlo -Le dije, ella chilla aún más con rabia y me descarga una cachetada en el rostro. Que claramente le devuelvo.- Que sea la última vez que me pegas, ¿Escuchaste, Nancy?

En ese momento entran varias de las demás recepcionistas a la sala y Nancy se echa a llorar en un asiento mientras toca su vientre. Pero me importa un carajo, tengo rabia, rabia con ella por zorra, rabia con Jungkook por perro y rabia conmigo misma por permitirme meterme en una aventura que tarde o temprano iba a terminar mal.

Tomo mi cartera y me acomodo los tacones, levantó la mano para pedir un taxi y cuando lo consigo de una vez el entrego el dinero.

- A la empresa de Jeon Jungkook, por favor.