𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 3: 𝑪𝒂𝒇𝒆..?

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El tiempo pasaba lento, lento, lo único que resonaba en la cabeza de Akito era ese poema, lo cursi y empalagoso que era, ¿Quien pudo haber escrito semejante bomba de azúcar para el?
Cada vez que se acordaba de aquellas palabras escritas a mano en papel solo se sonrojaba y le daba cierto tipo de enojo el cual solo hacia que hundiera su cabeza en su pupitre ahogandose en su propio berrinche.
Escucho el sonido del timbre de salida de la escuela y rápidamente se levantó de su silla, agarro su mochila y se fue, no se despidió de nadie y cuanto menos lo notaron ya no estaba en el aula, parecía que había volado a su casa.
Llegó a su casa y cerró la puerta, Ena estaba en la cocina tomando agua, iba de salida para irse a la escuela, lo vió llegar de reojo, lo escaneo y con un tono sarcástico y malhumorado le dijo:

Ena: ¿Por qué tan temprano? ¿Hoy no pasaste a ver a la novia o qué?

Akito suspiro con fastidio y le dijo:

Akito: Callate.

Subió a su cuarto y solo se recostó, nuevamente ahogado en su propia cabeza y volteo a ver al techo pensando infinidades, pero de repente se le ocurrió una idea.
pensó: ¿Debería pedir un consejo o contarle a alguien? Tal vez me sienta mejor.
Entonces Akito agarro su celular y decidió ir al café del Street Sekai.

En la barra se encontraba Meiko, vio llegar a Akito y lo saludo.

Meiko: ¡Hola Akito! ¿Que te trae por acá? ¿Todo bien?

Decía con una voz cálida mientras servía un rico café.

Akito agarro la silla roja cercana a la barra y se sentó sobre ella, de alguna manera se sentía un poco tonto y con algo de vergüenza le dijo a Meiko con una voz baja:

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Akito agarro la silla roja cercana a la barra y se sentó sobre ella, de alguna manera se sentía un poco tonto y con algo de vergüenza le dijo a Meiko con una voz baja:

Akito: ¿Puedo contarte algo?

Meiko abrió un poco los ojos en modo de sorpresa, pues Akito no es de contar sus cosas, tratando de hacer que se sienta en confianza le dijo:

Meiko: Claro, claro, sin problema.

Akito le contó sobre lo que pasó hoy en la escuela, metió su mano a su bolsillo del pantalón y le mostró el poema a Meiko.
Meiko cuidadosamente desdobló la hoja y leyó aquellas polémicas palabras, con una voz tierna expresó:

Meiko: Que preciosas palabras, quien te las escribió debe quererte mucho, ¿No tienes ni una pista de quien pudo escribirlo?

Akito suspiro y nego con su cabeza.
Meiko se quedó pensando por un momento y dijo:

Meiko: Y, ¿No has pensado que fue alguien del grupo?
(Claramente refiriéndose a Vivid Bad Squad)

Akito se quedó pensando e inmediatamente descarto a An pues ella no se tomaría el tiempo de hacer esas cosas, con problemas y hace su tarea, también descarto rápidamente a Kohane, pues el sabia que la pequeña hamster lo veia como un hermano mayor nada más, en eso Meiko habló con una voz tranquila y sugerente:

Meiko: Sabes, Toya te quiere mucho. De otra manera que tú no notas.

Akito abrió sus ojos, un escalofrío recorrió su cuerpo de pies a cabeza al entender la sugerente indirecta muy directa de Meiko:

Akito: Te refieres a que...Eh?

Meiko: Ujum.

Akito desconcertado se levantó de la silla y le dijo a Meiko:

Akito: Bueno gracias por el café Meiko, nos vemos.

Meiko: ¡Nos vemos!, Cuídate.

Akito salió con más dudas que respuestas, Meiko casi le había confirmado que Toya gustaba de el pero por alguna razón, no podía sentir nada más por el, jamas se habría imaginado que Toya lo veia de esa manera.
Por alguna razón sabia que ese poema no lo había escrito el, algo le decía que el no fue.

Unos 30 minutos después de que Akito se fue Toya decidió ir al Street Sekai, el rico olor a cafe llenaba el lugar.
Volteo y vio a Meiko sentada en el sofa:

Toya: Hola Meiko.

Toya cómodamente tomó asiento en el suave sillón del café enfrente de Meiko.

Meiko: Hola Toya, que gusto verte por aquí, siéntate te invito un café vale.

Meiko se levantó del sofá y Toya con una sonrisa cálida le agradeció.

Toya: Gracias Meiko.

Meiko orgullosa se coloco enfrente a el, lo observo a los ojos y le dió una palmadita en el hombro a Toya, con una voz entusiasmada le dijo:

Meiko: ¡Ese poema realmente cautivó a Akito!, le escribiste muy bonitas palabras.

Toya confundido no entendía de que hablaba y solo miraba a Meiko con cierto desconcierto. Meiko notó que Toya no sabía de que hablaba.

Toya: Eh, ¿Que poema?

Meiko: El que le dejaste a Akito en su casillero hoy.

Toya sin entender nada, y con una voz un poco entrecortada le dijo a Meiko:

Toya: Yo no le escribí nada...

Meiko se dió cuenta. Se sentía horriblemente culpable ya que prácticamente le había confirmado a Akito que fue Toya quien lo escribió y realmente Toya no sabía nada.
Ella solo intentaba ayudar a Toya ya que previamente ella sabía de sus sentimientos hacia el y dió por hecho rápidamente que el fue el autor de dicho poema.

Toya puso su mano en su labio y se quedó callado en señal de angustia ya que ahora sabía que alguien gustaba de la misma persona que el....
¿Quién gusta también de el?
Pensó Toya mientras los nervios poco a poco se apoderaban de el.

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(Hola muchas gracias por leer :3, agradezco su apoyo a este pequeño fanfic ❤️)

𝓜𝓮𝓵𝓸𝓭𝓲𝓪𝓼 𝓔𝓷𝓽𝓻𝓮𝓵𝓪𝔃𝓪𝓭𝓪𝓼 🎵🎈🥞✧⁠*⁠///////Akirui Donde viven las historias. Descúbrelo ahora