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— Ah — suspiro. Yoongi, Yoongi, Yoongi. ¿Por qué duele aun recordarte?

— Tengo una reservación, a nombre de Park Jimin — menciono a la recepcionista. Ella se mantiene respetuosa y lejana, pero al dirigirme al ascensor veo que brinca de alegría por conocerme.

Aun mantengo la chispa. Soy humilde con el efecto que provoco en los demás, pero no puedo negar que eso eleva mi ego. Nadie me dice que no...

Subo el elevador hasta uno de los pisos mas altos. Bueno si existió uno...

El elevador se para en el piso tres y veo como entra una pelota roja, que fue pateada por una pequeña con el cabello alborotado.

— Papa, corre — dice riendo mientras entra y toma su juguete.

— Rose, no corras — Yoongi entra también y al notar a alguien mas, hace reverencia como en su país natal — buenas tardes — recupera su compostura y selecciona el mismo piso.

Maldita sea.

Pasa segundos mientras toma a su hija en brazos y le da indicaciones que no debe soltarse de él.

— Las niñas buenas hacen caso a sus padres y si pierdes tu pelota, no te preocupes que yo te comprare otra cariño — besa la mejilla de su hija y acaricia su melena negra y lacia.

Es prácticamente el vivo reflejo de él. No creo que sea adoptada.

Yoongi sigue absorto en su hija y eso me duele. Compartimos tanto momentos juntos que se reducen a solo un saludo sin sentido. Merezco respeto. Toso en un intento de que note mi presencia y lo consigo.

Ese es Yoongi, él puede estar alado de su exnovio y no prestar atención. Cuando su sorpresa acaba, una sonrisa amable aparece. Para mi mala suerte es una linda sonrisa.

— Jimin... que sorpresa verte. Disculpa, soy un despistado. Mira Rose, el es un viejo amigo saluda al señor Jimin — la escena es muy tierna, porque al momento de mencionar "amigo", la cara de su hija brilla y una sonrisa igual de bonita que él de su padre hace presencia.

— Buenas tardes, señor Jimin — habla con un toque de felicidad y pena.

— ¿Entonces tu serás el cuarto juez? — su pregunta hace que vuelva mi atención al bello hombre.

— Así es. Fui avisado por Jungkook. Me dijo que era necesario estar mañana en la junta de presentación —

— Oh, es muy buena noticia. Supongo que mañana conoceremos a nuestros compañeros...— su platica quedo interrumpida por el ascensor y nuestra llegada al piso. — ¿Tu también bajaras aquí? —

— Si, es momento de descansar — soy parlanchín la mayoría del tiempo, pero es que ver a Yoongi es un golpe bajo.

Y Yoongi parece ser el parlanchín ahora. A cambiado.


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The Voice - jimsu/jiyoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora