Los padres de Abril 1/2

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Narrador omnisciente...

(Años atrás...)

—Abelardo,te amo. — la joven beso a su amado con dulzura sintiendo que por fin habia encontrado el amor verdadero pero que equivocada estaba.

—Yo también Adriana,yo también. — mintió el predestinado de la joven omega.

La pareja de predestinados se encontraban sentados debajo de un gran árbol observando el atardecer.

Estaban por cumplir un año de conocerse,y 5 meses de descubrir que eran predestinados,la omega se consideraba la persona más afortunada del mundo por tener una persona echa para amarla y ella no planeaba desobedecer el destino,claro que no sabia cuales eran los planes del destino,cual era la historia de amor que se repetiría con ellos,pero a ella no le importaba,era feliz con el echo de tenerlo con ella y que "la amara"  como el alfa siempre decía.

El alfa por otro lado no le importaba en lo absoluto,es más,nisiquiera creía en los dichosos predestinados,pero disfrutaba que tenia la vida de esta chica en sus manos,y  que podia jugar con ella tanto como se le diera la gana,¿Porque? Porque para el es muy fácil decir "te amo" sin sentirlo. Sí,así de mierda era,y a el no le interesaba cambiar para nada.

—Amor mío... — la chica dirigió su mira a el mencionado.

—¿Si? — volteó a verla, encontrándose con los ojos color chocolate.

—Tu... bueno... pu... pues,tu sabes que... — el alfa pudo notar un brillo formarse en los ojos de su "novia". — Somos... predestinados,y yo quería saber si... ¿Tu te vas a casar conmigo?

La pregunta lo tomó por sorpresa,por dentro está riendo y burlándose de la ilusa omega,pero si quería seguir manteniendo la farsa, debía mostrarse tranquilo y seguro,tal cual como lo hizo.

—Claro que si Adri. — mintió utilizando el apodó que sabía derretía a la omega. — yo quiero algo serio contigo. — acunó el rostro de su novia con sus manos. — quiero todo contigo. — volvió a mentir con descaro.

La chica sonrió y sintió un bombardeo de emociones,amor,emoción y miles más.

Abelardo no pudo evitar ver sus preciosos ojos y el como se formaba un brillo en ellos que los hacía lucir más hermosos, después bajar la mira a sus labios,esos carnosos labios que tenían vueltos locos a varios y el podría morder,besar y hacer todo lo que quisiera con ellos.

Adriana era una chica hermosa,una de las más bonitas de la universidad a,a ojos de muchos,la más bonita,más de 40 chicos,chicas,alfas,betas,incluso omegas,estaban enamorados de ella y eso era algo que Abelardo sabía a la perfección y queria aprovechar al máximo.

Abelardo era bastante guapo,de pelo castaño y ojos miel que a muchos traían embobados,el también era muy popular tanto por ser muy guapo como por tener cierta fama de mujeriego,y Adriana estaba consciente de ello.

Aunque ella pensaba que el cambiaría por ella,se había enamorado demasiado,estaba cegada por completo.

-

Los meses pasaron,ella cada día se enamoraba más y se aferraba a que el también la amaba y cambiaría,el cada vez la hacía sufrir más.

En este momento Adriana se encontraba con su fiel amiga Aurora,llorando en sus brazos por el alfa que la traía loca.

—Esque Auiri,estoy muy confundida,mi loba y mi corazón me dicen que el me ama pero mi mente me dice que el nuca va a cambiar. — le dijo mientras lloraba y su amiga la consolaba acariciando su espalda con movimientos circulares y la abrazaba.

Nací para amarte... [Rivari] [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora