Hight School Sweethearts

3. running

El semialbino se encontraba lavándose los dientes después de removerse entre las sábanas de su futón buscando voluntad para levantarse y dejar la calidez y comodidad de este.

Según él aún era temprano, pues solo había apagado su alarma 3 veces, pero se dió cuenta que estaba equivocado cuando se escucharon unos toquidos en la puerta.

Fue a abrir perezosamente pues aún no despertaba por completo.

-¿Aún no estás listo bastardo?- cuestionó mirándole mal

-ya casi estoy- respondió enjuagandose la pasta dental y echándose agua en la cara para lavársela

-ajá- pronunció observando al contrario bostezar y sentarse en la silla del escritorio

-me dormí tarde- trató de justificarse

-idiota, encima de que eres un maldito flojo ¿No duermes bien? ¿Acaso quieres disminuir tu rendimiento o que mierda?-  regañó

-no...tengo insomnio- explicó

-oh...en ese caso, tal vez cambiar tus hábitos te ayude- sugirió pero después se autorecordó que no estaba ahí para hablar con el semialbino y que todo ello estaba retrasándolo

-en fin, cámbiate- ordenó viendo al contrario quitarse la camisa a mientras volvía a bostezar

-agh, pareces un jodido crío- se quejó yendo al closet de Todoroki para husmear un poco hasta encontrar ropa deportiva

Se la lanzó y por fin pudieron salir de la habitación de este.

-¿Siempre sales a correr a esta hora?- cuestionó el semialbino mientras calentaban

-no, a veces más temprano - respondió

-¿En serio?- cuestionó

-sí, si quieres ser el mejor, tienes que trabajar más duro que todos los demas- explicó

-lo entiendo pero...a veces también es importante simplemente no hacer nada- opinó al respecto

-comencé a levantarme tarde desde que nos mudamos a los dormitorios, anteriormente Endeavor me obligaba a entrenar desde bastante temprano, pero ahora que no está, no tengo la necesidad de hacerlo-

-deberias construir tu disciplina por ti, no por el viejo-

-sí lo sé, y la tengo, solo que la trato de equilibrar con otras cosas, cosas que me gusta hacer- respondió

-bueno veo que ya estás bastante despierto, así que a iniciar- cambio de tema

-sí- asintió siguiendo al rubio quien empezó con un trote a velocidad media y minutos después quitó la sudadera que lo cubría del frío

Entonces dejó ver completamente aquel short relativamente corto semipegado a su cuerpo, el cual resaltaba sus piernas tonificadas y glúteos bien trabajados.

Por arriba llevaba una de sus habituales camisetas de tirantes negra, ¿Quien diría que el oversize escondería tanto?.

-tengo hambre- comentó el semialbino a los pocos minutos

-si te hubieras levantado más temprano, te habría dado tiempo de comer algo- reclamó

-aún tengo que acostumbrarme a levantarme temprano otra vez- respondió continuando con su tarea

-¿Vas a ir a mi habitación a traerme todas las mañanas?- preguntó al blondo

-¿Crees que soy tu madre o algo así?- volteó a verlo feo

-solo por hoy, mañana te espero afuera de los dormitorios, puntual- exigió -si no, no voy a esperarte- amenazó

-esta bien- accedió -correr acompañado es mejor que hacerlo solo- comentó fugazmente

-supongo que sí- Katsuki no lo negó

Siguieron por un tiempo corto hasta que el blondo frenó en seco soltando un suspiro.

-mierda, estoy sudando mucho- se quejó quitando el sudor de su frente con la parte baja de su camiseta

-oh lo siento ¿Quieres cambiarte de lado?- pregunto el semialbino

-¿Eh?- no entendía la relación de las cosas

-estas de mi lado izquierdo- señaló ese lado de su cara y entonces el contrario entendió

-¿Entonces es cierto que emites más calor de un lado?- cuestionó curiosamente

-sí- asintió -es una función natural de mi cuerpo- explicó

-como sea- se enderezó pasándose hacia el lado contrario para seguir corriendo los pocos minutos que les quedaban antes de ir a prepararse para la academia.

Pronto la alarma del rubio que indicaba el final de la rutina de cardio sonó haciéndole parar siendo seguido por el semialbino.

-vamonos o llegaremos tarde bastardo- ordenó dirigiéndose a los dormitorios

Cuando llegaron la gran mayoría de alumnos ya estaban despiertos, algunos habían terminado de ejercitarse y otros estaban preparando su desayuno o comiendo este.

Entre ellos el grupo del rubio, Mina, Sero y Kaminari simplemente comían lo que Sato había preparado y Kirishima tomaba un batido de proteína después de su arduo y varonil entreno matutino.

Los cuatro, al igual que los otros presentes se extrañaron bastante al verlos llegar juntos, es decir, sabían que tenían una relación medianamente buena, pero no tanto como para ir a entrenar juntos.

-Bakubro- llamó el pelirrojo a su amigo acercándose -¿Acabas de venir de correr?- cuestionó

-sí, fuera de mi camino, voy a bañarme- pidió

-oh Todobro- también saludó al semialbino -¿Fueron a entrenar juntos?- cuestionó viendo al contrario asentir

-auch- se tocó el pecho fingiendo estar ofendido -eso es traición bro, nunca has querido entrenar conmigo en las mañanas- dijo al blondo

-que te valga- siguió caminando ignorando las miradas curiosas ante el comentario del pelirrojo

-Todoroki kun, ¿Quieres té?- Yaoyorozu se había acercando al mencionado

-ah sí, está bien- aceptó sonriéndole a la chica, quien correspondió el gesto

Bakugou rodó los ojos al ver tal escena de reojo y siguió con su camino.

-Bakugou kun, ¿Quieres...- para cuándo le iba a ofrecer té al rubio este ya se había ido

-yo si quiero Yaomomo- pidió Kyoka recién llegando al comedor

-claro que sí- asintió yendo a su tetera para servir dos tazas

Aquel día se pasó más rápido que de costumbre, tal vez por la incertidumbre de qué ocurrirían en los cursos para obtener la licencia, principalmente por parte de Shoto, pues se sabía que Bakugou y él no eran los únicos, también estarían allí Kemy de la academia de Shiketsu e Inasa, el culpable de que el semialbino no aprobara el exámen.

La hora y media antes de que el autobús pasara por ellos la usaron para comer y hacer tareas.

Para cuando Katsuki salió del edificio, Todoroki ya estaba esperándolo en la entrada, lo cual le sorprendió un poco considerando que había sido él quien había ido a levantarlo en la mañana.

-Hola Bakugou- saludó tranquilamente al verlo llegar

-mitad y mitad- dijo acomodando su maleta

-mierda, mi traje- pronunció al haber olvidado lo más importante

-oh pasé por él- anunció el semialbino sacandolo de su propia maleta para entregarselo

-¿por qué carajo harías eso?- preguntó confundido

-porque soy amable tal vez- respondió -además pasé por el mío también- complementó

-gracias, supongo- lo guardó en la maleta

Sin más el autobús llegó justo a tiempo para que ambos subieran, al parecer era un servicio que solo le prestaban a UA por tener sus propios dormitorios a diferencia de otras academias, por ende, solo serian ellos dos, todo el trayecto de ida y de regreso. Tampoco podía ser tan malo.

Y nunca derritieron el hielo de la cancha, en fin, cada dia mas canon el Todobaku.