⁶- río rojo.

0 0 0
                                    

Jihyo y Sana llegaron a las diez de la mañana al sótano.
- ¿¡Dónde estábais!? - Preguntó Nayeon, alterada y preocupada. Todo se cambió cuando vieron que a Sana le temblaban las piernas y a Jihyo el dedo índice y el dedo del medio. Nayeon se quedó estupefacta, Mina no paraba de reír y los chicos se quedaron analizando.

- Uhm... Bueno... Nosotras... - Jihyo empezó a recordar.

<< ESCENA +18 (Si no queréis verla, podéis pasarla). >>

Jihyo y Sana estaban en los pasillos, pasando por ahí. Sana parecía bastante nerviosa, Jihyo estaba notándola nerviosa.
- Sana. ¿Estás bien?
Sana giró la cabeza hacia Jihyo.
- Jihyo... Debo contarte algo.
Vio el reloj. Eran las ocho de la mañana. Miró a Sana.
- Vamos a una zona privada.
Se metieron en una habitación.
- Jihyo... Es que... Verás... He empezado... A sentir cosas sobre tí durante éstos días... Y yo-

Fue interrumpida por un beso repentino de Jihyo, la mencionada anteriormente le empujó contra la pared y empezó a bajar sus manos a su cintura, Sana puso las manos en las mejillas de Jihyo mientras que se empezaban a meter lengua en el beso. Las manos de Sana bajaron a los hombros de Jihyo, la cual apretó la cintura de Sana mientras la atraía hacia ella. La colocó contra la cama y Jihyo estaba encima de Sana, empezando a quitarse la ropa entre besos. Jihyo bajó hasta estar la cabeza entre las piernas de Sana. Empezó a chupar su zona íntima y metió su lengua entera, mientras oía los gemidos de Sana y los retorcimientos de placer. Siguió moviendo la lengua dentro de su zona. Luego, salió saliva entre la lengua de Jihyo y la zona de Sana. Jihyo se chupó el dedo índice y el dedo de en medio, ya que eran los únicos dedos sin uñas.
- Avísame si te hago daño...
Sana asintió con la cabeza, mientras que la otra mano libre de Jihyo le agarraba el muslo de Sana.
Empezó a introducir los dos dedos dentro de la zona íntima de Sana, empezando a quitar, introducir, quitar, así muchas veces y cada vez más rápido y apasionado.
- ¡Ah! ¡Jihyo! ¡Más rápido! ¡Ah!
Jihyo no paró de introducir ni de quitar los dedos, se sentía satisfecha al oír los gemidos y ver los retorcimientos de Sana al sentir placer.

<<>>
Jihyo no recordó nada más.
Todos se quedaron estupefactos.
- Vamos a tratar de escapar. - Cambió de tema Sana. - Creo que iré a buscar información.

- Voy contigo. - Se acercó Chaeyoung.

Chaeyoung y Sana se fueron.
Jihyo se acercó a Nayeon y se quedó con ella.

En los pasadizos, están Chaeyoung y Sana pasando con sigilosos pasos. Abrió una puerta secreta y entraron aquí:

- ¿Crees que es buena idea? - Chaeyoung agarró del brazo a Sana

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- ¿Crees que es buena idea? - Chaeyoung agarró del brazo a Sana. - Tengo miedo.

- No te preocupes, Chae. Nos iremos vivas. - Sana tranquiliza a Chaeyoung y siguen andando.

Todo era tranquilo, lo que alarmó a Sana. Ningún lugar que había ido del internado era tan tranquilo como ése.
Sana y Chaeyoung empezaron a discutir debido a un tema que pasó hace unos días, gritando entre ellas.
De pronto, se escucharon unos ruidos. Sana trató de llevar a Chaeyoung a un lado, pero Chaeyoung la empujó, enfadándose.
- ¿Qué haces?

Un monstruo de tres metros, ciego pero no sordo, con falta de tacto y de olfato, desnutrido, sin ojos, empezó a agarrar fuertemente a Chaeyoung y a comérsela viva, desgarrando la ropa y la carne como si fuera un pollo, mientras Chaeyoung gritaba de agonía, dolor y muriendo viva. Sana se quedó como estatua, con los ojos como platos, su cuerpo debilitándose y sin poder moverse en absoluto, viendo cómo el agua se convierte en roja.
El monstruo se fue corriendo de ahí al no escuchar nada más. Sana se quedó quieta, sin saber cómo reaccionar. Sin hacer ruido, empezó a caminar hacia la salida, con el corazón a mil por hora. Empezó a recordar todo sin evitarlo y su respiración fallaba como si fueran latigazos. Corrió al sótano y empezó a llorar.

- ¡Sana! - Gritó preocupada Jihyo, corriendo hacia ella y abrazándola sin presión.

- No pude hacer nada... No pude evitarlo... Quise hacer algo... - La voz de Sana se rompió cuando empezó a recordar, llorando más y abrazando fuertemente a Jihyo.

𝓛𝓸𝓼 𝓮𝔁𝓹𝓮𝓻𝓲𝓶𝓮𝓷𝓽𝓸𝓼 𝓯𝓪𝓵𝓵𝓲𝓭𝓸𝓼.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora