La Reina del Infierno y el Primer Hombre.

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Capitulo 5

también conocido como Lilith y Adán, tienen una conversación largamente esperada.

La primera pareja........ fallida, más bien.

Adam se sorprendió por lo… involátil que se sentía al estar sentado frente a ella en esta sala de reuniones.

Probablemente estaría más iracundo si Lucifer, con toda su presunción y su carácter come mierda, estuviera aquí.

"Si hemos terminado", dijo Adam mientras se levantaba para irse, contento de haber terminado con esto.

"Adám"

Algo ardía en su pecho. Ella dijo su nombre tal como solía hacerlo en el Edén. Y no quería pensar en eso. Ella no consiguió hacerle pensar en eso.

"¿Y ahora qué, maldita sea?"

"Lo lamento."

Adam se detuvo. Dejó de hablar, dejó de moverse y incluso dejó de pensar. Simplemente dejó que el eco resonara en su cabeza.

Había algunas cosas que, después de diez mil años, que eran básicamente inalterable en su mente.

1.Nunca podrá recuperar por completo lo que perdió en el Edén.

2.Lucifer nunca arreglara ni compensara ninguna de sus meteduras de pata.

3.Lilith nunca se disculpa por nada que hizo.

Adán se giró para mirarla.

Lilith. La bella, grácil, sensual, con cuernos y demoníaca Lilith.

Sus ojos morados eran tan majestuosos que el color quedó grabado en la humanidad como el color de la realeza.

Y por primera vez desde que la había conocido, esos ojos indomables estaban bajos y su noble frente arqueada.

O esto era un truco y podría serlo........ o algo grande había sucedido cuando él no estaba mirando.

A pesar de todo su sentido común, se sentó y escuchó.

"No me arrepiento de estar enamorada de Lucifer", aclaro suavemente..... "Tampoco me arrepiento de no estar enamorado de ti."

Adam la miró poco impresionado, comenzando a preguntarse por qué esperaba algo......

"Pero lamento mucho haberte hecho pensar que te odiaba".

Adam se quedó mirándola fijamente por un momento, tratando de descifrar eso. "¿Se supone que debo sentirme feliz sabiendo que no sentiste NADA por mí, Lilith?"

—No, Adam —suspiró Lilith profundamente, y el tiempo cayó sobre ella brevemente—. No estaba enamorada de ti, pero sí te amaba. ¿Cómo podría no amarte? Ambos nos conocíamos por completo. Simplemente...  Ni nosotros.. ni los ángeles comprendíamos que el amor que nos habían dado no era el de los amantes.

"¿Me estás diciendo que estás aquí con las tetas retorcidas porque me amabas como a un hermano?" Adam preguntó sin rodeos.

Lilith puso los ojos en blanco. "¿Te vas a poner nerviosa si digo que sí?", replicó.

"No", dijo Adam con amargura. "Tampoco es que significara una mierda."

"¿No es así?" Lilith preguntó con complicidad. "Esto... todo lo que ha pasado durante los últimos diez mil años se debió a que ninguno de nosotros en el Edén realmente... hablaba de lo que nos molestaba. Lucifer se sintió apartado por sus hermanos, yo me sentí controlado y limitado-"

Fruto de universos alternosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora