Fruto de universos alternos

Lu y Lily

Capitulo 12

también conocidos como Lucifer y Lilith, se convierten en niños y de repente este es el problema de Adán.

-Lute, puedes traer tu trasero a la embajada

Lute no estaba segura de qué esperaba cuando llegó a la embajada tras la llamada de Adam. Sin embargo, no espero esto.

- ¿Señor? - preguntó ella con incertidumbre.

-Lo digo en serio, puedo soportar más de esta mierda, pero no tengo muchas ganas, Esto ya es demasiado raro -insistió Adam, intentando sonar autoritario en lugar de quejoso.

-Adam, necesito que me expliques mejor si quieres que te ayude -pidió Lute, ya preguntándose en qué glorioso lío se había metido su líder esta vez.

Adam gimió en voz alta, Bien, entonces, ¿recuerdas esa reunión sorpresa que se suponía que tendría con... Lucifer y Lilith?.

En su cabeza sonaron las alarmas. Adam no había usado ni una sola palabra insultante para describir a los gobernantes del infierno. Eso estaba muy... mal.

-Sí, ¿qué pasó?, preguntó lentamente.

-No hice nada, esta mierda no fue mi culpa de ninguna manera -dijo Adam antes de fruncir el ceño-. Puede que suene mal Pero no tengo ni puta idea de cómo paso esto, tengo el cerebro hecho un lío.

-Señor, Concéntrese, por favor -insistió Lute con fuerza.

-Bien, bien, bueno... ah, joder -dijo, acercándose a una puerta y abrirla bruscamente.

Lute miró dentro de la sala de reuniones y trató de comprender lo que estaba viendo.

Ella estaba fracasando en esa simple tarea.

-Papá, Lilith me robó mi serpiente otra vez -gritó pequeño Lucifer suplicante desde la mesa, señalando a la serpiente hecha de luz de estrellas, sostenida por unos tentáculos sombríos.

-No es cierto, solo quería verla -se defendió Lilith, quejándose del niño ángel caído que estaba sentado frente a ella que no le prestaba el juguete.

-Señor, ¿esos son...? -preguntó Lute lentamente, observando los que debían ser los Gobernantes del Infierno en forma de niños. Eran jóvenes, de seis o siete años probablemente, y vestían versiones en miniatura de su atuendo habitual. ¿O tal vez era el mismo atuendo, solo que encogido por arte de magia?

-Sí -respondió Adam con falsa calma.

-Y ellos son..." continuó Lute, lentamente asimilando la situación.

-Sí, sí, lo son, confirmó Adam nuevamente asintiendo.

Lute asintió, procesó eso y pasó a la siguiente pregunta. ¿Pero Cómo...?.

-No tengo ni puta idea, eran así cuando llegué -respondió rotundamente-. Lute, necesito ayuda, ¿vale? Puedo ocuparme de los niños, pero entre las estupideces que pueden hacer con sus poderes y tratar de averiguar cómo solucionar esto........

-Señor, no se preocupe, estoy preparado para una situación como esta-aseguró Lute rápidamente.

-¿ tú que....? ¿Para esta situación exacta? -Adam dudó, mirando fijamente a Lute asintiendo con confianza-. ¿Cómo, carajos?

-No es importante, Solo necesito hacer un viaje rápido de regreso al Cielo-respondió Lute, ignorando cómo sus mejillas grises estaban un poco más brillantes por el rubor dorado.

-A la mierda, si puedes con esto hazlo, tetas-peligrosas -dijo Adam, haciéndole señas para que siguiera adelante. Lute saludó y se fue rápidamente.