I.T. T. O. T. M. | ❛ Quiero compartir todo esto contigo, Kang-ha. ❜
━━━ 👠 Roh Seo-yun creció en un mundo de comodidades y lujo, protegido por sus padres, dueños de una gran empresa de aerolíneas. Sin embargo, su constante ausencia la marcó profunda...
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☆ el te ama, parecía sinceró 🛍️ capítulo cinco
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MESES ANTES.
Seo-yun estaba de pie frente a la puerta de la casa de Ri-an, tomando un respiro profundo antes de llamar. Había sido un día largo y complicado, y necesitaba el consuelo de la única persona que podía entenderla sin palabras. Cuando Ri-an abrió la puerta, su rostro se iluminó con una sonrisa, pero sus ojos reflejaban una preocupación sutil.
──Hola, Seo-yun.──dijo suavemente, apartándose para dejarla entrar.
──Hola, Ri-an.──respondió ella, intentando sonreír, pero el cansancio se reflejaba en sus ojos.
Entraron y Ri-an la guió hacia el salón, donde una suave luz cálida llenaba la habitación. Las ventanas abiertas dejaban entrar la brisa nocturna, trayendo consigo el suave murmullo de la ciudad lejana. Se sentaron en el sofá, y por un momento, solo se miraron, dejando que el silencio hablara por ellos.
──Pareces agotada.──comentó Ri-an, tomando su mano y acariciándola con suavidad.
──Ha sido un día difícil.──admitió Seo-yun, su voz apenas un susurro.
──Ven aquí.──dijo Ri-an, atrayéndola hacia él en un abrazo cálido y reconfortante.
Ella se acurrucó contra su pecho, sintiendo el ritmo constante de su corazón bajo su oído. Ri-an comenzó a acariciar su cabello, sus dedos deslizándose con ternura por los mechones oscuros. La calma que emanaba de él era todo lo que necesitaba en ese momento.
──Gracias por estar aquí.──murmuró Seo-yun, cerrando los ojos y dejándose llevar por la sensación de seguridad que Ri-an le brindaba.
──Siempre.──respondió él, su voz un susurro que parecía prometer más de lo que las palabras podían expresar.
Después de un rato, Ri-an se apartó ligeramente y miró a Seo-yun a los ojos.──¿Quieres hablar de lo que pasó hoy?──preguntó, su tono lleno de comprensión y sin ninguna presión.
Seo-yun negó con la cabeza.──No ahora. Solo... quiero estar aquí contigo.──dijo, sus palabras sinceras y llenas de necesidad.
Ri-an asintió y se inclinó para besar su frente.──Entonces solo estaremos aquí, juntos.──dijo con suavidad.
Se acomodaron en el sofá, Ri-an apoyando su espalda contra los cojines y Seo-yun acurrucándose en su pecho. La habitación estaba en silencio, salvo por el sonido lejano de la ciudad y la respiración tranquila de ambos.
