-Capitulo 10-

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Namjoon regresó a su casa después del funeral de Seokjin.

Se estacionó afuera de la casa, mirándola, el arrepentimiento y la culpa lo perseguían.

Cuando por fin decidió bajar del auto, comenzó a llover, corrió hasta la puerta y abrió, encontrándose con todo oscuro, pues las cortinas seguían abajo desde la noche en que llevó a Seokjin al hospital.

Tragó grueso y se adentró, caminando hasta la sala, dejó su abrigo sobre el sofá donde siempre encontraba a Seokjin sentado, esperándolo, y cuando se levantaba para recibirlo, él despreciaba su afecto, eso era lo que había hecho durante esos dos meses en los que decidió y lo perdió todo.

El silencio lo estaba matando, odiaba que estuviera tan vacía, pues la sentía llena con Seokjin, que siempre estaba en la cocina haciendo la comida, en la sala leyendo o tejiendo algo, en su habitación acomodando su ropa, o en algún lugar de la casa.

Subió las escaleras hacia su habitación, caminó por el pasillo, viendo los cuadros y fotos que habían ahí.

Llegó hasta la puerta y abrió lentamente, como cuando llegaba tarde después de ir a ver a Yekult, como odiaba ahora haber hecho eso, hacerle caso a uno de sus amigos, en tener una opinión para poder tener un hijo, ya que él pensaba que Seokjin no podía dárselo, y por eso lo comenzó a despreciar, de haberlo sabido, hubiera salvado a su esposo.

Abrió por completo la puerta, viendo la habitación como la dejó aquella noche, encendió la luz, viendo aún sobre la cama las sábanas revueltas, las almohadas en el suelo y esa enorme mancha de sangre que estaba ahí, la cuál le trajo nuevamente la imagen de esa noche, sacudió su cabeza y quitó todo de la cama, metiéndola a un bolsa para poder tirarla.

Le dió vuelta al colchón y le puso sábanas nuevas, suspiró una vez terminó.

Fue a su clóset, de donde sacó su pijama, mientras buscaba, un sobre de tamaño considerable le llamó la atención, no lo había visto ahí.

Lo tomó y lo observó, era de color blanco, y afuera tenía el nombre de Seokjin.

Se sentó en la orilla de la cama y lo abrió, sacando de primera una hoja donde se confirmaba el embarazo de su esposo, dando una prueba de sangre positiva, al igual que su gen de ser un doncel, dejó a un lado el papel y sacó otro similar, donde daba el resultado sobre el cáncer que Seokjin tenía, indicando una fase 2, dándose cuenta que cuando fue detectado ya estaba muy avanzado.

Volvió y a ver qué había, sacando varias ecografías, donde se podía ver el interior del vientre de Seokjin, observando un pequeño punto, el cuál supuso que era el hijo que Seokjin llevó en su interior, los siguió observando, dándose cuenta que su esposo llevaba al pie de la letra el cuidado de su bebé.

Las ecografías eran de su primer, segundo y tercer mes, su bebé solo vivió tres meses dentro de Seokjin.

Sacudió el sobre para ver si había algo más, y si lo había, un sobre más pequeño de color rosa, lo tomó y observó, en el destinatario estaba su nombre, era para él, de Seokjin.

Temeroso lo abrió, sacando una carta, se acomodó para poder leerla bien, tenía miedo de lo que pudiera decir.

??/??/????

Para Namjoon...

Hola mi amor, de verdad espero que algún día encuentres esta carta, puesto que soy consciente de que lo harás después de que yo me haya ido.

No sé por dónde empezar.

Primero que nada quiero decirte que no sé que es lo que pasó, que nos pasó, un día simplemente comenzaste a salir de más, no era que estuviera mal, si no que me mentías de con quién, por qué si, tuve que investigar si era cierto lo que me decías, y resultaba ser mentira.

Comenzaste a ser más distante y frío conmigo, comenzaste a tratarme de inútil, me empezaste a insultar, a gritar, a golpear, tú qué juraste jamás ponerme un dedo encima, lo hiciste y eso indicó que todo se estaba cayendo, nuestro matrimonio se vino abajo.

Descubrí que soy un doncel, puedo procrear y quise decírtelo, traté de hacerlo, y pensé que así podríamos volver a ser los mismos, pero no iba a suceder, cuando toqué el tema me gritaste y me dijiste que tú no cuidarías un bebé, así que asumí que tampoco ibas a ver por mi en el embarazo si te decía, así que tampoco te dije que tenía cáncer de corazón, me dió mucho miedo, por qué me iba a morir y dejarte solo, sabía que no podría tener a mi bebé pero decidí hacer todo lo posible.

Conocí a Yuhno, es un hombre muy amable y dulce, durante este tiempo ha estado viendo por mi, como si yo fuera su esposo y mi bebé suyo, me cumplió mis antojos y peticiones, me cuidaba en las noches cuando tú no llegabas, ya que mi corazón comenzó a fallar cada vez más, lo hacía por qué sabía que aún si tú supieras todo, no harías nada, y yo también lo creí, y así pudo haber sido.

No voy a entender él por qué sucedió todo, a lo mejor me faltó algo, a lo mejor necesité algo para serte suficiente.

Te pido perdón por la comida, no sé si de verdad te gustaba, pero ya no la volverás a tener que probar y mentirme.

Perdón por ser tan consentido y pedirte cosas, o más bien reclamarte los gestos de cariño que dejaste de darme, ya no los volveré a pedir.

Perdón por comenzar a comer más, pero mi bebé me lo pedía y no podía negarme.

Perdón por nunca contarte sobre esto, lo tendrás que saber de alguna forma, ya que me dió miedo contarte lo que sucedía, tú me creaste ese miedo.

Perdón por no haber sido el esposo perfecto, trate de serlo.

Pero sobre todo, perdón por qué te dejaré solo, sé que no viviré mucho, el cáncer está por todo mi sistema y no me queda mucho tiempo, no sé si conoceré al bebé, pero Yuhno me dijo que haría lo posible para que pueda nacer, espero que así sea.

Esta carta la escribí por qué me lo acaban de decir, no sé cuánto tiempo me queda exactamente pero no es mucho, quiero decirte que te amo mucho, desde que te conocí eres el amor de mi vida, así yo ya no sea el tuyo, tú si serás el mío.

Te dejo las ecografías del bebé, cuidalas mucho, podría ser la única cosa que te quede de mi.

Te amo infinitamente, Namjoon, no importa si ya no eres mío, siempre te voy a amar, ojalá en otro tiempo pueda coincidir contigo y ser felices, por qué en este ya no se podrá, yo moriré y tú, seguirás.

Vive feliz y con quién quieras, ¿De acuerdo?

Te ama infinitamente, tu esposo Kim Seokjin.




Fin.


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Adiós.

Nos vemos en la próxima historia.

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