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- What's up, Wil? I feel you distracted. [¿Qué pasa, Wil? Te noto distraído]

- Nothing, I just something that caught my attention. [Nada, solo vi algo que llamó mi atención]

Respondió mientras devolvía su vista a su amigo. Había visto al Omega de la otra vez, y estaba seguro de que el también lo vio.

- Sure... -Murmuro su amigo inseguro-. Well, changing the subject. Tomorrow is my birthday, don't you plan to give me anything? [Bueno, cambiando de tema. Mañana es mi cumpleaños ¿no piensas darme nada?]

La voz de su amigo suena curiosa y emocionada.

- I don't know Tommy, maybe I'll be very busy. [No lo sé Tommy, tal vez valla a estar muy ocupado] -Su voz es burlona provocando una mueca de fingida molestia en Tommy.

- Fuck you, Soot -Y con eso terminan de tomarse sus cafés. Wilbur le hace una seña a una mesera para que venga y paga la cuenta.

- I'ts time to leave Tommy, we have a lot of things to do in this place. We came to Argentina for a reason. [Es hora de irnos Tommy, tenemos muchas cosas por hacer en este lugar. Por algo vinimos a Argentina]

Habla acercándose a Tommy. Tommy asiente y se para de la silla, parándose a su lado comenzando a salir del lugar.


- Hasta que llegas a casa.

Se escucha una voz femenina dirigida hacia el cuando entra a la casa que más que casa era una mansión. Su familia no era para nada humilde.

- Lo siento, mamá. Se me hizo un poco tarde. -Respondió acercándose a ella y dándole un beso en la mejilla.

Su madre, una Alfa de cabello castaño, ojos cafés y de feromonas con olor a madera y humedad. Muy avariciosa, todo lo contrario a su padre. Un Alfa amable de cabello castaño oscuro, ojos un poco más claros que los de su madre y con feromonas con olor a canela y cítricos.

- Está bien. Vamos, tu padre tiene algo que contarnos.

Los ojos de la mujer brillaban con avaricia mientras lo observaba con una sonrisa muy falsa a su parecer. Iván frunció el ceño,¿Qué era lo que querían esta vez?

- Eh, si, está bien. -Responde no muy confiando de lo que le quieran decir.

- Buenas tardes papá, buenas tardes Victoria.

Su padre y hermana le regresan el saludo. Toma asiento al lado de su hermana, con sus padres al frente.

- Te tenemos una sorpresa por tu cumpleaños, cariño -Habla su madre con avariciosos. Su padre le da una sonrisa incómoda.

- Pero mi cumpleaños es hasta dentro de un mes ¿de que hablan?

Pregunta confundido. Esto no le estaba gustando para nada.

- Si, bueno, no es un 'regalo' en si, pero decidimos decírtelo ahora.

- ¿Decirme qué? -Indago, mirando fijamente a sus padres y hermana pero está se veía igual de confundida que el.

- Bueno, verás... ¿Sabes qué la empresa a decaído un 'poco', verdad? -La voz de su madre sonaba un poco fastidiada respecto a ese tema.

Si a un poco se refiere a casi estar en quiebra, entonces si, un poco, solo un poco.

- Si ¿porqué? -Dirigió sus ojos cafés hacia su padre pero este solo apartó la vista. Raro, muy raro.

- Verás, hemos tomado la decisión de comprometerte con un Alfa adinerado que nos sacara. Lo conoceras una semana después de tu cumpleaños 18.

La voz de su madre sonó emocionada. Su padre estaba incómodo, se notaba que no estaba de acuerdo con esto pero sabía que no podía hacerla cambiar de opinión.

- ¿Qué? -Dijeron el y su hermana al unísono.

- Lo que escuchaste, cariño. Además, aún es joven.

- ¿Estás loca, mamá? Iván apenas va a cumplir 18 ¿Y tú vas y lo comprometes con alguien que nisiquiera conocemos? ¡Fácilmente podrían venderlo o usarlo como objeto sexual!

Su hermana estaba molesta mientras él estaba callado, en shock de que su propia madre lo hubiera literalmente vendido a un desconocido.

- No me alzes la voz Victoria, soy tu madre.

- ¡Pues una madre no vendería a su hijo a un desconocido!

Iván volteo a ver a su padre mientras su hermana y su madre-Si es que podía seguir llamándola así-discutían. Su papá solo le dio una sonrisa triste en modo de disculpa.

Si hermana y su madre dejaron de discutir cuando él se levantó de la silla.

- ¿A donde vas? No hemos terminado de hablar.

Hablo su madre, frunciendo el ceño.

- Voy a mi habitación. -Respondió sin ganas. Su hermana lo siguió.

- Ivi...

- Por favor, quiero estar solo. -Su hermana no insistió.

Una vez estuvo en su habitación se encerró, se sentó en la cama y finalmente dejo las lágrimas caer.

Desde que se presentó como omega a los 11 años su familia no había hecho más que despreciarlo y humillarlo, excepto unos pocos tíos y primos suyos, incluyendo a su padre y hermana. Solo en ellos podía confiar.

«Eh escuchado que es el único Omega de su familia»

«Seguramente su familia a de estar decepcionado de él ¿pero quien no lo haría?»

«Eres un omega, solo sirves para abrir las piernas y dar hijos»

«Omega»

«Omega»

«Omega»

Tantos años escuchando esas palabras a pesar de esforzarse por ser el mejor pero por más que sacará las mejores notas en todo el colegio, lo único que de decían era que seguramente se acostaba con los maestros porque ¿que se podría esperar de un omega?

¿Qué pensarían sus amigos al enterarse de que su propia madre lo vendió a un desconocido cualquiera solo para mantener su empresa? Tal vez se alejen o tal vez se pongan de su lado.

El cansancio lo termino de consumir y sin darse cuenta se quedó dormido entre lágrimas.

Volvió a soñar con ese Alfa que vió una sola vez pero que entre sueños lo reconfortaba.

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Volví, de pura suerte pero de que lo hice lo hice.

La verdad no pensaba actualizar tan rápido pero que se le va a hacer.

En fin, chauuuuu :]

990 palabras.

Café en día lluvioso | Spreen x Wilbur |EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora