XXVI

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Estábamos llegando cuando empiezan a aparecer paparazzi's, esos chismosos!, ash, no lo quiero ni ver, empezaron a tomar fotos y a preguntar el por que estábamos ahí, hay mismo se difundió el rumor, empezaron a llegar mas personas y no dejaban pasar a nuestro auto, nos bajamos y siguieron con sus preguntas.

"¿𝓛𝓸𝓼 𝓚𝓪𝓾𝓵𝓲𝓽𝔃 𝓽𝓲𝓮𝓷𝓮𝓷 𝓹𝓻𝓸𝓫𝓵𝓮𝓶𝓪𝓼 𝓳𝓾𝓭𝓲𝓬𝓲𝓪𝓵𝓮𝓼?"

"¿𝓔𝓼𝓪 𝓮𝓼 𝓵𝓪 𝓼𝓮ñ𝓸𝓻𝓲𝓽𝓪 𝓢𝓬𝓱𝓵𝓲𝓽𝔃?!"

"¿𝓟𝓸𝓻 𝓺𝓾é 𝓮𝓼𝓽á𝓷 𝓪𝓺𝓾í?"

"𝓒𝓸𝓷𝓽𝓮𝓼𝓽𝓮𝓷!!"

"𝓗𝓸𝓵𝓪 𝓪𝓺𝓾í 𝓮𝓼𝓽𝓪𝓶𝓸𝓼 𝓮𝓷 ***"

No podía con más!!, estaba volviéndome loca, nos tuvieron que bajar a todos escoltados por la policía, habían demasiadas personas.

Llegamos al juicio, no podía ver a ese señor, sentí sus partes en mi trasero, casi abusa de mi, enserio estoy mal, siento asco por mi misma, no se que hacer.

Tom cogió mi mano y entramos, la apreté fuerte por el miedo, me cogió la cara suavemente y me dijo.

-Como ya te dije el no podrá volver a hacerte nada más, no lo permitiré-

-Gracias Tom-dije eso y seguimos caminando-

Hasta que lo vi, tenía unas ganas inmensas de llorar, no podía aguantar, pero tenia que ser fuerte y no mostrar debilidad delante de ese asqueroso violad*r.

El juez se puso a favor de nosotros, tenia tanta alegría por no tener que  volver a verlo, pero tengo un corazón tan bondadoso que me dio un poco de pesar por ese, pero no tengo por que hacerlo, ¡que se pudra en la cárcel!

Sexo, sudor y calorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora