Hablemos de libros

Amos Oz

Capítulo especial

Amos Oz, fue uno de los autores más reputados de la narrativa israelí, así como un reconocido intelectual íntegramente comprometido con el proceso de paz en Oriente Próximo.

Amoz Oz nació el 4 de mayo de 1939 en Jerusalén, registrado al nacer con el nombre de Amos Klausner. Fue escritor, novelista, poeta y periodista israelí, considerado como uno de los más importantes escritores contemporáneos en hebreo. Era hijo único de Fannia Mussman y Yehuda Arish Klausner. La familia de su padre era de Lituania. Su padre estudió historia y literatura en Vilna, entonces parte de Polonia. Su madre creció en Rivne, aquel entonces también parte de Polonia, Ahora de Ucrania. Ella asistió a la universidad de Praga, donde estudió historia y filosofía.

En 1917, sus padres huyeron de Odesa a Vilna, y de allí en 1933 al Mandato Británico de Palestina. Su madre que sufría de depresión, se suicidó en 1952 cuando Oz tenía 12 años.

«De joven odiaba a mi padre, porque creía que él era el responsable de que mi madre se hubiera suicidado. Y luego odié a mi madre, porque ¿Cómo podía haberme hecho algo así? ¿Cómo pudo salir de casa sin decir adónde iba? Ella era la que nos exigía a todos nosotros que cada vez que saliéramos, dejáramos una nota debajo del jarrón diciendo exactamente dónde íbamos...»

« Y sobre todo, me odiaba a mi mismo» decía Amos, «porque si mi madre se había suicidado, yo no debería ser merecedor de cariño. ¿Cómo era posible? Hasta las madres de los nazis querían a sus hijos, ¿y mi madre no me quería a mí?. Solo cuando tuve a mis propios hijos, empecé a sentir compasión por mis padres y a quererlos. Sólo entonces pude comprenderlos. Cuando escribí «Una historia de amor y oscuridad», en realidad, me sentí un poco padre de mis padres».

Su gran capacidad artística y literaria la adquiere en Jerusalén donde creció rodeado de libros: «el santuário de libros del tío Yosef en Talpiot, los grilletes de libros de mi padre en el piso de Kerem Abraham, el refugio de libros de mi madre, los poemas del abuelo Alexander», desde muy pequeño escribe poemas e inventa histórias que cuenta a sus compañeros en los recreos, lo que le convierte en el blanco de las burlas y los golpes de otros niños. Sucede que por aquellos años cuarenta y cincuenta, escribir poemas y hablar con más educación significaba debilidad en una sociedad donde prevalecia la imagen del joven fuerte, bronceado y musculoso.