- Sal de ahí - una voz suave te saco de tus pensamientos, tus ojos por fin pudieron ver algo de iluminación que rápidamente huiste de ahí - Que bueno que estas bien - Era tu tío quien te había sacado de ahí.
- No eres mi tío, verdad - Fue lo primero que dijiste, sabías que no era muy cercano a tí pues no se parecían en nada.
-
a la vez sí y a la vez no. Es difícil de entender y explicar- asentiste un tanto confundida- Tal vez pronto podamos serio aún mejor - te sonrió tomando tu mano cerrando la puerta de metal - Ahora hay mucho por hacer, lamentablemente no podemos esperar más. Ive es muy mala y estricta- te guio a una habitación donde rápidamente te puso una máscara, una máscara que se asemejaba a tu rostro con unas modificaciones respecto a que eras una niña.
