Before Him ⁞ MiChaeng

Capítulo 11 ꥟

No one's pov

Julio 2024

Un mes había pasado desde que había decidido buscar a Mina, pero nada. No había información de ella.

— ¿Has podido encontrar algo? — Chaeyoung negó con la cabeza, aún concentrada tecleando en el computador por algún tipo de información.

Incluso había intentado llamarla por teléfono, pero no había respuesta, ella había cambiado de número.

— No se que voy a hacer — se cubrió el rostro con ambas manos, estaba desesperada.

Dahyun se acercó a donde estaba la menor, sonriendo. Ella ocultaba algo.

— Sabemos lo mucho que te has esforzado este último tiempo para mejorar — era verdad, las cosas entre las miembros ya estaban mucho mejor. Después de que Chaeyoung haya terminado con su ex pareja, decidió asistir con un psicólogo, quien la había ayudado hasta hoy con sus problemas y todo lo que le estaba afectado, incluso su ex relación con la japonesa. Las miembros la ayudaron a salir de ese momento de crisis, hasta incluso la ayudaron a recuperar un poco del peso que había perdido. — Por eso decidimos darte una mano — Chaeyoung la miró, un tanto confusa. Dahyun se sentó en la cama, junto a la coreana menor. — Investigamos y encontramos que Mina tendrá un fanmeeting en New York. Tenemos la fecha y dirección exacta — Dahyun le entregó un papel con toda la información.

Chaeyoung alzó la vista, mirando a Dahyun. Sintió como sus mejillas rápidamente se humedecían.

— ¿D-De verdad? — se limpió alguna de las lágrimas que caían libremente.

— Por supuesto. Te quisimos ayudar porque te queremos y tú felicidad es nuestra prioridad.

— Unnie...— la coreana rompió en llantos, abrazando a Dahyun.

— Así que prepara tus maletas, Son Chaeyoung, que el diez de julio nos iremos a New York, juntas.

— Ustedes son las mejores, no se como agradecerles por todo lo que hacen por mi — escondió su rostro en el pecho de la mayor.

— Nos puedes agradecer sonriendo siempre, como solías hacerlo — con cuidado tomó las mejillas de la menor, manteniendo un cálido contacto visual. — y también comprándome barras de chocolate — añadió. Ambas rieron.

— Todas las que tú quieras, unnie — sonrío la pelinegra.

Lo que tanto había deseado se haría realidad en un par de días. ¿Que les tendría el futuro preparado para ellas?