#1

21 9 0
                                        

Clarissa

-¡Mamá!-grito desde mi habitación y no escucho una respuesta. Bajo apresurada, ya voy tarde para la salida con las chicas.

-¿Qué Claris?

-Has visto mis audífonos?

Ella solo me tira los audífonos

Le doy un beso y salgo, el sol está insoportable

Es julio, el verano, las calles del pueblo estaban llenas de jóvenes riendo, tomando y besándose.

Hoy se cumplían dos años desde que Axel se fue y no he recibido ni una sola llamada de él, ni un mensaje.

Pero aprendí a vivir sin el amor de mi vida, ya su ausencia la siento menos.

Sigo mi camino y me adentro en el bosque, Samara, Angelina y Amara me están esperando en el río para pasar la tarde ahí.

-¡Al fin!-exclama Samara cuando llego

-Acuerdate que lo bueno tarda en llegar, por eso yo llego tarde-respondo dejando mi mochila y quitándome el pullover que tenía puesto dejando ver mi traje de baño

-Te toca la música-me grita Angelina desde el río

Sonrió, ellas saben lo que significa

Me conecto a la bocina y pongo mi playlist de las canciones de Morat

La tarde nos la pasamos nadando y sonriendo como niñas pequeñas, las aves vuelan por todo el cielo el cual se torna de un color entre rojo y naranja por el atardecer.

-¿Han hablado con Frida?-pregunto

-Sí, ayer hablé con ella, me dijo que está con lo de la venganza por lo de Camile, aún la extraño-me explica Amara

-Ya hace cinco años fue lo de Camile-aclara Samara

Ya cinco años

Me acuerdo perfectamente de todos los momentos buenos y malos que había vivido con Camile

Frida y yo nos conocemos desde pequeñas, incluso las dos cumplimos años el mismo día.

Ahora Frida es directora de una empresa para la venta de armas o algo así creo, no le gusta mucho hablar de eso

-Cinco años que todavía duelen-Angelina recoge sus cosas mientras habla-Ya, vámonos, es casi se noche y después alguien no puede dormir

-¡Hey! ¡No jueguen con mi miedo a la oscuridad!-protesta Samara

-Ya, ya, ya, lo siento Samara-se disculpa Ange

Todas nos adentramos en el bosque y así poder salir nuevamente a la carretera que da hacia nuestro pueblo

Vernazza al ser un pueblo ubicado en la provincia de La Spezia, Liguria, en el noroeste de Italia, es bastante tranquilo. Todos nos conocemos y nos llevamos muy bien.

-¡Mamá llegué!-cierro la puerta detrás de mí

-Hola mi niña-saluda desde la cocina-Axel....

-¿Axel qué?-pregunto curiosa

-Él llamó

¿Llamó?

Por lo menos está vivo

-Ok, voy a darme una ducha

-¿Solo me vas a contestar eso?

Dejo caer mi mochila en una de las sillas y me acerco a mi madre

-Sí mamá, solo eso, ¿sabes por qué?-niega confundida-Mamá, me pasé noches llorando porque creía que el se había ido por mi culpa, creí que el se había dado cuenta de lo tanto que lo amo-tomo una bocanada de aire-¡Yo lo amo mamá!

No somos perfectos  [SIN EDITAR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora