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Narra TN:
La situación en la casa era cada vez más tensa. Andrew intentaba mantener la calma, pero era evidente que la actitud de Ashley comenzaba a afectarlo. Decidí que lo mejor sería tomar un momento para mí y salir a tomar un poco de aire fresco en el jardín.
Mientras caminaba por el huerto, recordé momentos de mi infancia. Me senté en una vieja banca y cerré los ojos, tratando de calmar mi mente. Sabía que nuestra situación era complicada y que Ashley no me aceptaría fácilmente, pero tenía que seguir adelante.
Después de unos minutos, escuché pasos acercándose. Abrí los ojos y vi a Andrew caminando hacia mí. Parecía preocupado.
—¿Estás bien? —preguntó, sentándose a mi lado.
Asentí, forzando una sonrisa.
—Sí, solo necesitaba un momento para despejarme. ¿Y tú? ¿Cómo estás manejando todo esto?
Andrew suspiró, pasándose una mano por el pelo.
—No es fácil. Ashley siempre ha sido muy protectora conmigo, y ahora, con todo lo que está pasando, sus emociones están a flor de piel.
Le miré, dejando escapar una suave risa, admitía que en el pasado había pasado por situaciones similares. Por eso mismo, no me sentía en el derecho de juzgarlo.
—Gracias por defenderme, Andrew. Sé que no es fácil para ti.
Él sonrió, un destello de calidez en sus ojos.
—Antes no lo pude hacer... quizás ahora yo...
Antes de que pudiera responder, escuchamos un ruido proveniente de la casa. Nos levantamos rápidamente y corrimos hacia adentro. Al entrar, vimos a Ashley parada en medio del salón, mirando fijamente una foto enmarcada en la pared.
—¿Qué pasa, Ashley? —preguntó Andrew, acercándose con cautela.
Ella levantó la vista, agarrando entre sus manos el cuadro, claramente molesta.
—¿Recuerdas esta foto, Andrew? —dijo, señalando la imagen de una familia feliz—. Mamá, papá, tú y yo. Antes de que todo se fuera al demonio. Antes de que nos abandonaran.
Andrew asintió, su expresión triste.
—Lo recuerdo, Ashley. Pero no podemos vivir en el pasado. Tenemos que seguir adelante.
—¡¿Seguir adelante?! —gritó ella, su voz expresaba resentimiento—. A la mierda con eso, no creo que podamos hacerlo, porque eres un mentiroso Andy.
Miré a Andrew quien al escuchar aquel apodo su rostro tranquilo comenzó a mostrar muecas de molestia, una fibra sensible había sido tocada y quizás lo mejor sería escapar de esta situación.
Andrew tomó una profunda respiración, tratando de mantener la calma. Sus manos se cerraron en puños mientras trataba de encontrar las palabras adecuadas.
