Belleza enferma mimada

47: entonces quitatelo todo

Cuando Zhou Xingyan regresó después de responder la llamada, Yun Nian ya estaba sosteniendo un tazón grande de helado y comiéndolo.

Realmente aún no ha entrado en pleno verano, pero está tan ansioso por estar tranquilo que Zhou Xingyan ya puede imaginar la expresión de sus dientes rechinando cuando intentó detenerlo.

El cuenco pronto estuvo medio vacío y el aroma dulce y lechoso flotaba en el aire. Todavía no tenía intención de detenerse. Zhou Xingyan finalmente no pudo evitar recordarle: "No puedes comer más".

Yun Nian cambió su posición mientras sostenía el cuenco, mirando hacia él con la nuca.

"Hace demasiado frío. Ya no puedes comerlo, Yun Nian".

repitió con énfasis.

Yun Nian se volvió para mirarlo, con sus delicadas cejas muy fruncidas, lo que obviamente era una señal de perder los estribos. Zhou Xingyan ya había pensado en quitarle el tazón de helado cuando perdió los estribos y llevarlo arriba.

Sin embargo, el par de ojos oscuros se puso en blanco y su temperamento no explotó. En cambio, respondió de manera bien considerada: "Está bien".

Zhou Xingyan se lamentaba de que el sol saliera por el oeste y que su pequeño antepasado también aprendiera a ser obediente y obediente.

"Si no quieres comer, no comerás", murmuró Yun Nian, cruzándose de brazos y rápidamente miró al hombre alto de enfrente, "Entonces quiero comer pastel, el pastel siempre está bien".

Zhou Xingyan no pudo entender por un momento si realmente quería comérselo o si estaba enojado, "¿Qué tipo de pastel quieres comer?"

Yun Nian pensó seriamente durante dos segundos y dijo: "La tienda por la que pasé en los suburbios del este de la ciudad la última vez que salí".

Zhou Xingyan ahora estaba seguro de que este pequeño antepasado estaba atormentando deliberadamente a la gente. El viaje de ida y vuelta desde su casa al este de la ciudad tomó al menos dos horas, y no tenía ninguna prisa. Ese día pasó por ninguna pastelería. , tal vez en realidad no hubo ninguno.

"Está bien, espera en casa".

Confiscó el cuenco de helado, se dio la vuelta con una expresión tranquila en el rostro y salió por la puerta.

Yun Nian se sentó allí decepcionado, sintiendo que Zhou Xingyan realmente no entendía lo que estaba diciendo. Solo quería dejarlo continuar comiendo el plato de helado.

Estaba debatiendo si debía ser una persona que rompiera su promesa. De todos modos, Zhou Xingyan no estaba aquí ahora, así que podía irse en silencio... De repente hubo un trueno fuera de la ventana, lo que lo sobresaltó, y de repente se sintió culpable y atrevido. No pensar en ello otra vez.

La lluvia comenzó repentina, feroz y abrumadora, y continuó hasta bien entrada la noche.

Zhou Xingyan nunca regresó, y Yun Nian sospechaba que estaba atrapado bajo la lluvia o que había tenido un accidente...

La fuerte lluvia no alivió en absoluto el calor de la noche. Al contrario, lo inquietó cada vez más. Su corazón estaba en un estado de confusión y necesitaba urgentemente algo que lo calmara.

Pensó perdido que todo esto era culpa de Zhou Xingyan, y todo era por culpa de Zhou Xingyan que estaba tan incómodo.

Cuando Zhou Xingyan regresó, la lluvia todavía arreciaba, como si planeara inundar el mundo entero. En realidad, no condujo fuera de la ciudad. Después de todo, el propio Yun Nian ni siquiera sabía si esa tienda existía.