Estaba con Raven, mi mejor amiga en el cubículo del tren, esperábamos a las demás chicas que estaban dando vueltas por ahí.— Entonces ¿Mattheo conjuró la marca tenebrosa? — Raven me miraba con los ojos abiertos.
— Shh, habla más bajo.— Dije y cerré la puerta del cubículo.— Y si, fue el, lo mi con mis ojos.—
— No lo puedo creer...—
— Pues créelo, toda la madrugada estuvieron en la oficina de mi padre.— Me recosté en la silla.
— Esto no me da buena espina, tengo una acorazada, cosas malas van a pasar.— Raven puso su mano en su pecho.
— Cállate Raven, siempre que tienes acorazonadas terminan pasado, me da miedo.— Suspire frustrada.
Las chicas entraron unos minutos después, nos saludaron y estuvimos charlando.
— Vi a Lorenzo, estaba con Tom Riddle. — Dijo Maya.
— Deberías hablarle. — Dije yo.
— ¿Estás loca Venus? Prefiero verlo desde lejos.— Hizo una pausa.— Olvídalo, eso sonó horrible.— Soltamos una risa, Maya era igual a Lorenzo, parecían mas Hufflepuff que Slytherin.
Al llegar a hogwarts entramos al gran comedor, Dumbledore hizo los anuncios de todos los años, nos presentó a nuestro nuevo profesor de Defensas Contras las Artes Oscuras, Alastor Moody.
— Ahora, quisiera informar algo.— Habló el director.— Hogwats a sido elegido como la sede de un legendario evento.—
— El torneo de los tres magos.— Continuó.
Contó de que trataba el dichoso torneo y que tendría un límite de edad, claramente se escucharon las protestas de los estudiantes.
— Por ahora, demos la bienvenida a las bellas señoritas de la academia de magia Beauxbatons y a su directora Madame Olympe Maxine.—
Unas señoritas vestidas de azul claro entraron, detrás de ellas venía una señora alta de ropa oscura. Las señoritas hicieron su entrada sonriéndoles a todos, de ellas salían mariposas.
— Cierra la boca Zabini.— Dijo Raven a su hermano riendo.
Me reí ante el comentario y toda la escuela aplaudió.
— Ahora a nuestros amigos del norte, recibamos a los orgullosos hijos de Dumstramg y a su director Igor Karkarov. —Siguió Dumbledore.
Voltee a la entrada del gran salón y de ella aparecieron unos chicos con bastones, golpeando el piso haciendo una melodía algo estruendosa.
Detrás de ellos venía el director con dos muchachos, Víctor Krum y Ralf Nilsson. Todas estaban boquiabiertas viendo a los jóvenes entrar.
Miré con atención la llegada y sentí la rápida mirada de Ralf.
— Increíble, este año de hogwarts si me va a gustar.— Daphne se acercó a nosotras.
— No eres la única Daphne.— Me reí al escuchar a la hermana de la rubia.
Miré a los chicos de la mesa y todos tenían una mala cara, lo cual hizo que me riera.
Después de la cena nos dirigimos a nuestra sala común, iba con Raven a nuestra habitación y sentí como agarraban mi mano y me llevaban fuera del lugar.
— Que mala costumbre tiene los Riddle.— Dije con fastidio al ver a Mattheo.
— Ni una palabra de lo que pasó en el Campeonato de Quidditch.— Su semblante era serio.
Rodee los ojos y intente salir del lugar pero el chico volvió a jalarme.
— Auch, idiota.— Le dije mirándolo mal.
— Ni una palabra, a nadie dije.— Seguía con su cara de pocos amigos.— Hazlo por tu propia bien.—
— Como digas Riddle, ¿Puedo irme? — El asintió con la cabeza y salí del lugar.
Entré a mi habitación y ahí estaba Raven.
— ¿Qué quería Mattheo? — preguntó
— Me amenazo, no quiere que nadie se entere.— Suspire frustrada.
— Que idiota, vamos, ya es tarde y tengo sueño. —
— Claro.— Entre al baño y suspire ondo, este año tampoco sería normal.
[...]
💭: Algo cortó el cap pero bueno, espero les esté gustando.
Un besito 🫶🏻
Valu 💭