𝑺𝒆𝒖𝒍𝒆𝒎𝒆𝒏𝒕 𝒂𝒗𝒆𝒄 𝒎𝒐𝒊

347 21 0
                                    

♔︎♔︎♔︎

Jake bajó las escaleras en completo silencio y con mero cuidado, sus piernas aún temblaban por haberse estado tocando de manera insistente allí abajo y aún seguía sin estar satisfecho.

Contuvo la respiración cuando vió a los dos alfas desde la barandilla de las escaleras, estaban de espaldas a él, sentados en el largo sillón con vista a la gran televisión, apagada, los dos estaban inmóviles y rectos.

Sin más, Jake terminó de bajar las escaleras y se aclaró la garganta para notarse. Sunghoon y Heeseung rápidamente voltearon, poniéndose de pies cuando lo vieron.

—Su alteza, ¿Está todo en orden?— Preguntó Heeseung en un tono calmado, y con su aguda vista, Jake pudo notar que el alfa tenía los labios hinchados, la igual que Sunghoon.

Eso lo descolocó un poco, sin embargo no le prestó tanta atención.

Jake fingió una mirada inocente, esa misma que hacía que todos cayeran a sus pies.

—No, Hees, solo no puedo dormir, ¿Les importa si me siento con ustedes?

Ambos negaron y se hicieron a un lado para dejar pasar al omega, luego fueron a sentarse uno a cada lado del omega, dejándolo así en el medio. Para los dos alfas,no era nada nuevo compartir con el príncipe, era un chico bastante sencillo y amable, gracioso incluso, pero había algo que si era completamente nuevo para ellos.

Jake estaba casi desnudo, la bata que traía era de seda, casi transparente, de un rosa bastante opaco que dejaba muy poco a la imaginación, con bastante piel a la vista y mostrando su prominente escote, sus pezones se marcaban sobre la tela en conjunto a la silueta de sus pechos.

Un silencio se extendió por la sala y Jake sonrió un poco al haber tenido resultados a su favor.

—¿Qué estaban haciendo?— Preguntó Jake, solo para tener algo con que aligerar el tema, se acercó un poco a Heeseung sintiéndose bastante a gusto con el olor que el alfa emanaba.

Heeseung suspiró profundamente, sintiéndose gustoso al sentir el aroma dulce del omega, bastante dulce a decir verdad, el cual se entremezclaba con el olor fuerte de Sunghoon y el suyo propio.

—No estábamos haciendo nada, en realidad.— Aportó Sunghoon, intentado mantener la vista fuera del cuerpo del más bajo.

A Jake no le gustó que estuviera apartando su atención de él, frunció el entrecejo y con cuidado, preguntó:—¿Por qué ambos tienen los labios tan hinchados? Parece como si se hubieran estado besando.

Los alfas se miraron entre sí y rápidamente apartaron la mirada, murmurando cosas inentendibles y excusas baratas.

Ah, a veces los alfas eran tan tontos que se delataban solos.

—Uh, ¿Se estaban besando de verdad?

Heeseung suspiró:— Queríamos que el tiempo pasara más rápido.

—¡Heeseung!— Gruñó Sunghoon y Jake no pudo evitar reír delicadamente como el príncipe que era.

—Ah, ustedes siempre hacen esas cosas y nunca me invitan.

𝑨̀ 𝒗𝒐𝒕𝒓𝐞 𝐦𝒆𝒓𝒄𝒊𓆙𝑯𝑒𝑒𝑱𝑎𝑘𝑒𝑯𝑜𝑜𝑛Donde viven las historias. Descúbrelo ahora