VIAJE AL PASADO INOXNARUTO

Capítulo 11

"¡OIROKE NO JUTSU!" gritó Konohamru y otra bocanada de humo lo envolvió. Naruto retrocedió y vio una versión femenina muy vieja del Tercer Hokage.

—Ko... ¿Necesitas hablar con alguien? —preguntó. Durante la última hora, el chico había dado en todos lados, excepto en el objetivo que se suponía que debía alcanzar con su jutsu sexy.

Vaya, en qué feas... no, feísimas mujeres se convirtió. Ahora sé de dónde salió la frase "un rostro que solo una madre podría amar", pensó Naruto con un estremecimiento en todo el cuerpo.

Konohamaru lanzó el jutsu.

"¿Qué estoy haciendo mal, hermano?" preguntó con voz malhumorada.

A la media hora de entrenamiento, Ko empezó a llamar a Naruto "hermano". El rubio lo dejó pasar porque era mejor que "Jefe".

"Hm. Forma el sello del carnero". Dijo Naruto mientras usaba un jutsu que Tsunade le había enseñado para leer los niveles de chakra de alguien. Bueno, está bajo los efectos de sustancias que podrían importar. Pensó el rubio.

—Vamos a comer algo. —El rubio guió al chico harapiento hacia el pueblo. Naruto estuvo tentado de detenerse en el puesto de ramen de Ichiraku, pero Ino había puesto su delicado pie en el suelo. Duro. El rubio pensó. Solo me permiten comer ramen una vez a la semana. Es tan mala. Se quejó, pero luego vio un puesto familiar y tuvo una idea.

"Vamos Ko, tengo ganas de dango." Naruto lo condujo al puesto de dango, una sonrisa formándose en su rostro cuando vio la kunoichi con cola de caballo estilo piña y malla.

Bingo. "Toma asiento", dijo Naruto mientras tomaban asiento para poder vigilar a Anko, que estaba sentada en el bar comiendo dango y leyendo un libro.

Esto va a ser fácil. Naruto pensó con una sonrisa mental que, de ser posible, le habría partido la cara en dos.

XX

—Gah —dijo Ino mientras metía más basura en la bolsa—. Lo juro, si descubro quién hizo esto, lo colgaré del poste que está en lo alto de la torre del Hokage por sus órganos reproductivos usando agujas senbon.

La puerta había sido destrozada, el lugar parecía como si lo hubieran incendiado y los bomberos habían tardado un tiempo en apagarlo.

Sakura estaba usando una escoba grande para juntar escombros en una pila. "¿Por qué alguien haría esto?" preguntó la genin de cabello rosado.

Porque mi marido es el contenedor del zorro de nueve colas que asoló Konoha hace trece años. No te enteraste hasta que una misión salió mal y él saltó sobre ti en un estado semitransformado. Ino pensó.

—La gente es estúpida —dijo Ino. Había encontrado el escondite de su marido y sus objetos preciosos estaban intactos—. Creo que le voy a preguntar a mamá si podemos quedarnos allí hasta que podamos conseguir un apartamento más nuevo.

Sakura asintió. "Este lugar parece una pérdida total. No puedo creer que hayan causado tanto daño".

Créelo de frente. Y esto no es de una sola vez, son años y años de esto. Naruto solo puede hacer una cierta cantidad de reparaciones con el dinero que tenía. Mierda, vamos a estar haciendo misiones de rango D de nuevo. Ino pensó y se estremeció ante algunas de las misiones de rango D que eran tareas que nadie quería hacer.

Sakura tomó una foto. "Naruto pasa mucho tiempo con el Hokage".

Ino miró por encima del hombro de la otra chica y vio la foto. Era de Naruto a los cinco años con el sombrero y la túnica del Hokage, mientras que el Tercero estaba de pie junto a él sonriendo.