Si dos seres que deseseaban estar juntos por siempre, aveces el mundo decide otro camino, nadie desea un cambio repentino, pero eso ocurrió, en la vida de estos monos que no le es dado su mayor deseo y que jamás será concedido.
En la noche estrellada, con la Luna alumbrando todo a su alrededor, se encontraba una isla, la cual en lo profundo había una cabaña la cual se escuchaba gritos de celebración y risas, todos riendo sin parar, comida y bebidas había, la naturaleza hacia su encantó con el silencio, respetando las risas de los seres.
Allí en medio de toda esa celebración, se encontraba un mono azabache con la mirada hacia sus manos perdido en sus pensamientos como si tuviera la mente vacía, miraba sus manos y las apretaba como si buscara respuestas, respuesta que deseaba tener, hasta que sus pensamientos fueron interrumpidos por el mono de pelaje naranjoso el cual río y dijo.
─¡JAJS! Que ocurre macaque? Te ves algo pensativo y algo fuera de lo común eh? Dijo el monillo travieso con risas, mientras se recostaba en su asiento sosteniendo una botella de vino la cual dejó en la mesa, a momentos después, quedando en la mirada de el azabache esperando a su respuesta sabiamente.
El azabache no dijo nada por unos diez segundos, hasta que hablo con algo de dificultad, debido a que ni el sabia que pensaba.
─No es de tanta importancia Wukong! Solo que... La mirada del azabache se quedó clavada de vuelta en sus manos, como si viera algo horripilante en ellas, su voz quedo atascada en su garganta, deseaba decirlo pero le costaba, hasta que respiro profundo y hablo.
─¿y si el emperador de Jade nos intentara juzgar nuestros problemas? ¿Que haríamos contra el? ¡No somos dioses para almenos ganarle! El azabache se veía preocupado, sin saber que hacer o que pasará, pues el mismo mono de ojos morados oscuro sabia que algo malo pasaría, lo sabia muy bien.
El mono de pelaje naranjizo, vio que el mono de sombras sobrepensaba las cosas, así que río en silencio, se levantó de su silla y se puso alado de su hermano, apoyando su mano en el hombro de este mismo y diciendo con una voz muy energética y con risas.
─ayyyy! Macaque! ¡Sobrepiensas demaciado las cosas!, deberías relajarte hermano, descansar ahora jaja! No pasará nada, el emperador de Jade ni nos tocará un pelo sabes por que? Dijo el mono travieso mientras reia y saltaba a la mesa a la espera de la pregunta de el mono preocupado.
El azabache confundido pero río para adelgazar el ambiente incómodo, pregunto.
─¡Jaja! ¿Por que exactamente wukong? Dijo con una sonrisa amable, pues sabia muy bien el azabache que wukong siempre era así de chistoso y despreocupado ante todo.
Wukong río y giro, dando un salto y dando un brinco a la mesa al caer y dijo graciosamente a su manera.
─por que el emperador de Jade es taaaaaaaan viejo que ni ve de lo que está más cerca en su cara!
Todos rieron, excepto el azabache el cual río un poco, pues sabia el objetivo exacto de el mono anaranjadito, con un suspiro se levantó de la mesa y dijo fingiendo bostezar y estar cansado, meseandose los ojos.
─mmh jaja creo que me voy hermanos, ando algo cansado y pues necesito irme a dormir, jaja los veré lueg-
El azabache fue interrumpido, el cual un ave de alas doradas con un pico largo y una sonrisa como siempre que daba dar a burlar, dijo entre risas y malicioso.
─aww encerio te vas ahora? Planeas escapar como siempre lo haces macaque? Siempre olcultandote entre las sombras, como una pequeña rata escapando de su depredador!
Luego de unos segundos de dichas palabras por el ave blanquesina, el azabache se enojo, su mirada no decía nada, pues permanecía neutral como siempre, pero por dentro le quemaba tanto, las ganas de golpearlo fueron presentes por como forzó sus manos, dando ganas de estrellarlas contra la cara de esa ave parlotona, hasta que wukong dijo.
─bueno y eso que? Macaque es uno de nuestros hermanos muy importantes Peng!, macaque tiene un gran poder de sombras encima es un gran monillo con buenos planes! ¡¡No digas tonterias JAJAJA!!
Todos rieron junto al mono burlón, mientras el ave blanquesina se sentaba en su silla de nuevo, algo indignado, mientras que el azabache sonrió a wukong por defenderlo y decidió retirarse porfin, pero antes, el monillo travieso le dio un gran abrazo al azabache el cual se sonrojo pero lo oculto gracias a la sombra de la puerta.
─JAJAJ! Descansa macaque! Mañana será otro dia ehh! Sabes que estoy aquí siempre tontin!
Su amor era hermoso, el cual aún permanecía oculto entre nada, deseando ser liberado algún día, por palabras, por cartas, por señales, lo que sea, el deseo permanecía en sus corazones de liberarse y saber que se amaban, pero aveces esas palabras llegan demaciado tarde y hasta en los peores momentos, sin poder ser feliz en el momento más deseado.
»----> 𝐶𝑜𝑛𝑡𝑖𝑛𝑢𝑎𝑟𝑎 <----«
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.