《FAMILIA》//Sirius X Severus// Omegaverse//Fanfic//Familia Black Snape//

La pareja Black Snape

El sol de la tarde se filtraba a través de las hojas de los árboles, creando un caleidoscopio de luces y sombras en el jardín de Hogwarts. Severus, con su túnica negra ondeando al viento, caminaba por un sendero de piedra, absorto en sus pensamientos.

Sirius, con una sonrisa traviesa, lo seguía de cerca, observando cada movimiento de su omega. Había estado planeando este momento por semanas, y la emoción le recorría el cuerpo como una descarga eléctrica.

"Severus, ¿a dónde vas con tanta prisa?", preguntó Sirius, alcanzándolo y tomando su mano.

Severus, con un gesto de desaprobación, respondió: "No tengo prisa, Black. Solo estoy disfrutando del paseo."

"Claro, claro", dijo Sirius, con un guiño. "Pero me imagino que no te importaría disfrutar aún más de este paseo si te acompañara un poco de música."

Con un movimiento de su varita, Sirius hizo aparecer un pequeño violín dorado, que comenzó a tocar una melodía suave y romántica. Severus, sorprendido por la aparición del instrumento, se quedó mirando a Sirius con una mezcla de curiosidad y asombro.

"Sirius, ¿de dónde sacaste eso?", preguntó Severus, con un tono de incredulidad.

"Un pequeño secreto", respondió Sirius, con una sonrisa pícara. "Ahora, cierra los ojos y escucha."

Severus, con una sonrisa de resignación, cerró los ojos y se dejó llevar por la melodía. La música, dulce y melancólica, le evocaba recuerdos de su infancia, de su familia, de su vida antes de conocer a Sirius.

"Severus, ¿te acuerdas de la primera vez que nos vimos?", preguntó Sirius, con un tono suave.

Severus, con los ojos aún cerrados, respondió: "Por supuesto que me acuerdo. Estabas haciendo una de tus bromas de siempre, y yo estaba a punto de darte una lección."

Sirius rió con ganas. "Sí, esa fue una de las mejores bromas que he hecho en mi vida. Y la mejor recompensa fue tu mirada de furia."

Severus abrió los ojos y miró a Sirius con una sonrisa. "Sirius, no puedo creer que te hayas enamorado de mí."

"No puedo creer que yo tampoco me haya enamorado de ti", respondió Sirius, con una sonrisa. "Severus, eres la persona más inteligente, más sarcástica, más hermosa que he conocido. Y te amo con todo mi corazón."

Sirius se arrodilló frente a Severus, con un pequeño cofre de madera en la mano. "Severus, ¿te casarías conmigo?"

Severus, con lágrimas en los ojos, asintió con la cabeza. "Sí, Sirius. Sí, me casaré contigo."

Sirius, con una sonrisa de felicidad, abrió el cofre y sacó un anillo de oro con un pequeño diamante. "Este anillo representa nuestro amor, Severus. Y espero que lo lleves con orgullo por el resto de nuestras vidas."

Severus, con un corazón lleno de amor, tomó el anillo y lo puso en su dedo. "Te amo, Sirius. Y prometo estar contigo para siempre."

Sirius, con una sonrisa radiante, la besó con pasión. El mundo a su alrededor desapareció, y solo quedaron ellos dos, unidos por un amor que parecía eterno.
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|

La mansión Malfoy, con su imponente arquitectura y su aura de opulencia, albergaba un ambiente inusualmente cálido. Narcissa Malfoy, con su porte elegante y su mirada penetrante, se encontraba en el salón principal, junto a Severus Snape, quien, a pesar del ambiente suntuoso, se sentía ligeramente incómodo.

Lily Evans, con su característica energía y su sonrisa radiante, se encontraba sentada en un sillón de terciopelo rojo, observando la escena con una mezcla de curiosidad y alegría. Los tres omegas estaban disfrutando de una charla.