¡I LIKE YOU𝒰𝓃𝒸𝓁𝑒! ︴𝙻𝚊𝚠𝙻𝚞

𝒞𝒶𝓅 5 ︴ ᥬ🍂

- ¡Tío deja las excusas! - Gritoneo la sobrina de luffy al Omega que se ruborizaban -. El doctor torao y tú esconden algo.

- Ya cállate, Tama. Son cosas de adultos, cuando seas mayor también vas a ser igual. - Frunció el ceño, a la vez que negaba y alejaba a la menor.

Llego a ver cómo un puchero se asomaba en la comisura de los labios de la menor, haciendo que luffy se sienta culpable, pero tenía razón; no le podía decir lo que había sucedido hace años atras.
Al pasar tiempo con su tío se volvió completamente igual que él, hasta luffy se daba cuenta de eso y Ace a veces le echaba la culpa de las actitudes mañosas de Otama.

- No te hagas el misterioso, luffy.

El nombrado reconocía aquella voz femenina, volteó rápidamente a ver de quién se podría tratar y acerto... Era Nami.
Bueno, su relación con sus amigos de la infancia se volvió más sólida y a tal punto de hasta regañarlo como lo solían hacer antes.

En poco tiempo pidieron hablar las cosas para disculparse mutuamente por algunas cosas. Actualmente, tienen una buena relación, para el corto tiempo que pasan juntos ahora es realmente admirable y eso que antes se hacían los duros con luffy.
Pero, las cosas cambiaron y ahora sabían las razones de luffy de lo que pasó.

- Tiene razón mi Nami-swan, no te hagas el que no quiere decir nada, diota.

- Pero sanji... - Hizo un puchero, evidentemente era la debilidad de aquellos dos.

- Tks... En fin, ellos eran algo en el pasado pero tu tío fue muy idiota y por eso sigue gustando de tu doctor.

- ¡Le gusta el doctor torao! - Grito con sorpresa.

Realmente eso la había tomado desprevenida, pero el problema era de que: ¿Por qué no le decía todavía? ¿Acaso era tan jodidamente estúpido su tío para no decirle nada al doctor torao?
Eso pensaba la menor hacia su tío, que la veía hacer una mueca en su rostro y suspirando pesada.

- ¡Ay, tama! No seas así.

- Eres mi tío y aún así eres idiota. - frunció el ceño la pelimorada.

- Tama no me digas eso, lo dices porque no entiendes las cosas y lo difícil que es. - Frunció el ceño, tocándole el pelo y desordenandolo.

La menor sólo se dedicó a mirarlo, aunque tenía razón su tío; no entendía muy bien lo que estaba pasando y también iba a entender si se lo explicaban.
Con la cara que puso, le indico a sus mayores que no le explicará nada, con eso Luffy entendió que era lo mejor y no quería explicarle algo tan complicado a ella.

Después de su pequeña charla, otama se quedó en casa de sus padres con Yamato y los tres adultos se dirigieron a la casa de luffy. La cuál, hasta ahora no sabían cómo era. (Ellos creían que luffy vivía con su hermano, por eso no querían preguntar mucho).

Hablaron de un par de cosas, luffy les decía que había estado bastante bien viviendo en Wano, era un lugar tranquilo y también de su pequeña aventura o mejor dicho su intento de noviazgo. Ellos estaban sorprendidos, pero tampoco iban a negar que luffy no iba a vivir todo el tiempo con culpa y resignarse a amar a alguien; sería cruel pensar eso, después de tantos años conociéndolo y creer que tendría que esperar a alguien que después de un tiempo no supieron nada.

Cuando llegaron, se llevaron una gran sorpresa. El departamento de luffy estaba ordenado, limpió y no había nada sucio... Realmente le había hecho bueno irse, pero sintieron la presencia de alguien más y se asustaron al ver algo saltar a los brazos de su amigo omega.

- Se llama Dugong, shishishi. - Dijo burlón, ya sabía cómo iban a reaccionar sus amigos.

- Vaya, que nombre tan original te pusieron Dugong. - Se burló el rubio, mientras veía a la gatita con pelaje negro, estaba un poco gordita y se veía que tenía un temperamento un poco arisco.